El último día del mercado de verano dejó dos movimientos inesperados en el CD Tenerife, por puesto y por nombres. Finalmente, Juan Carlos Cordero no incorporó a la plantilla un delantero, sino que cambió a un extremo derecho por otro. Nono González rescindió su contrato para firmar con la UD Ibiza por la presente temporada y la siguiente, y Víctor Mollejo hizo las maletas para viajar a Tenerife cedido por el Atlético de Madrid.

Víctor Mollejo (21/01/2001, Toledo) comenzó el curso en el Real Mallorca, al que se unió a préstamo en la ventana de enero de 2021 para ayudar en el ascenso del conjunto balear a Primera División (10 partidos y 2 goles, uno en el Heliodoro para darle el triunfo a la escuadra rojinegra). Tras ese éxito siguieron compartiendo el mismo camino. El técnico Luis García Plaza dio el visto bueno a una segunda cesión del futbolista, pero ni siquiera llegó a debutar en la Liga. El club que posee sus derechos, el Atlético –tiene contrato hasta 2024– había recibido ofertas por Víctor en equipos en los que, teóricamente, iba a tener más protagonismo. De hecho, la posibilidad de hacerlo en el Tenerife cambió las planes y tanto el club madrileño como Mollejo dieron el paso para que el jugador volviera a una categoría que conoce de sobra, dado que en la campaña 2019/20 intervino en 36 encuentros (6 goles) con el Deportivo de La Coruña y en la 20/21 jugó 10 con el Mallorca.

Antes, el canterano rojiblanco había tenido la oportunidad de probar la Primera División. Diego Simeone le dio minutos en cuatro partidos de la Liga 2018/19. Dos campañas más tarde repitió ese registro con otro uniforme, el del Getafe, en el que estuvo cedido antes de firmar con el Mallorca.

A modo de anticipo, Mollejo aseguró en los medios de comunicación del club que se sentía «muy feliz» por su fichaje por el Tenerife. Además, afirmó que la «confianza» que le mostró Cordero durante las negociaciones fue clave. «Se ha formado un proyecto muy interesante», declaró el jugador.

El intercambio entre Canarias y Baleares se completó con el pase de Nono al Ibiza, uno de los novatos en la Segunda División 21/22. Su salida llama la atención porque participó en dos de los tres partidos disputados por el Tenerife en esta Liga, dos de ellos como titular, en Fuenlabrada y, más recientemente, Oviedo. En su primera campaña como blanquiazul, el de Badajoz tuvo un papel discreto, aunque contó con oportunidades para reivindicarse: 39 encuentros, 29 jugando de inicio, contando Liga y Copa del Rey. En todo ese recorrido no logró aportar ni un gol.

Ahora buscará reencontrarse con su mejor versión en las filas de una UD Ibiza dispuesta a no tener una experiencia efímera en la categoría. El compromiso de Nono con el club es por dos campañas.

Con todo esto, el balance de altas en el Tenerife durante el recién clausurado mercado de verano es de once fichajes, si se cuenta el de Sergio González, quien jugó en el equipo blanquiazul la segunda vuelta de la temporada pasada cedido por el Cádiz y que ha vuelto en propiedad. Esa misma condición, la de no depender de otros clubes, la comparten todos los refuerzos menos Víctor Mollejo.

José León, Jérémy Mellot, Míchel Herrero, Elady Zorrilla y Enric Gallego firmaron hasta junio de 2023, y Juan Soriano, Alexandre Corredera y Sergio González lo hicieron por una campaña más. El mediocentro Pablo Larrea fue fichado por una con opción a otra.

Quedará para enero el plan pendiente de sumar al grupo un delantero más. La nómina de especialistas se reduce a Enric Gallego, Apeh y el canterano Ethyan.

Alberto y Manu Apeh se quedan

Desde el primer día de la pretemporada, Juan Carlos Cordero dejó claro que entre sus previsiones estaba la salida de Alberto Jiménez, quien no encajaba en sus planes por razones futbolísticas y económicas. Fueron pasando las semanas y la cesión o la desvinculación del majorero no llegó a producirse, ni siquiera en el último día del mercado. Hasta ese momento se intentó en las oficinas del Heliodoro Rodríguez López. Pero a Alberto, que tiene contrato con el Tenerife hasta 2023, no le convenció ninguna opción, más de una del extranjero. Seguirá en el plantel, pero sin la posibilidad de jugar. El de Apeh es un caso diferente. El club le habría abierto las puertas a un préstamo para que tuviera la ocasión de acumular más minutos, pero tampoco cuajó ninguna alternativa. El nigeriano sí será tenido en cuenta por Ramis.