A solo una semana para que se cierre la ventana de altas y bajas de verano, el Tenerife ha colocado en su nuevo puzzle una de las piezas esenciales, la que le faltaba, la del delantero centro. El elegido es Enric Gallego Puigsech, un goleador barcelonés de 34 años de edad que llegó ayer a la Isla para firmar un contrato de dos temporadas de duración con la entidad blanquiazul, después de desvincularse de un equipo de Primera División, el Osasuna.

Con esta novedad, la plantilla tinerfeña cuenta con dos delanteros profesionales –más los canteranos Jorge Padilla y Ethyan–, el recién incorporado Gallego y un Manu Apeh que podría marcharse cedido. Por tanto, se trata de una demarcación que no da por cerrada el director deportivo Juan Carlos Cordero. La opción de Yoann Touzghar, jugador del Troyes, quedó descartada por la decisión del club francés de no facilitar su salida. No obstante, el responsable del Tenerife en materia de fichajes maneja otras alternativas para intentar aumentar el potencial ofensivo del equipo antes del 1 de septiembre.

El que sí está confirmado es el fichaje de Enric, quien siempre estuvo entre las prioridades de Cordero y cuya contratación pasó por diferentes etapas por el alto número de pretendientes que compitieron por tenerlo. De hecho, Gallego fue relacionado en las últimas semanas con otros equipos de Segunda División como Leganés, Málaga, Real Zaragoza, Huesca... Lo cierto es que el ariete catalán no parecía tener hueco en el Osasuna. Budimir, Kike García y Chimy Ávila le taparon el paso, de manera que optó por situarse en el mercado con la carta de libertad en la mano. Lo hizo justo antes del comienzo de la Liga 2021/2022. Solo le faltaba escoger su destino profesional.

Despegue tardío

Con este paso dado, Gallego se convierte en el nueve del Tenerife, no por el dorsal que lucirá –ese número lo tiene Elady– sino por su función en el campo, la de especialista en moverse en el área rival, jugar de espaldas y generar espacios, incordiar a la defensa, rematar por arriba y a ras de césped, marcar... En esa faceta no le falta oficio. Sus números lo dicen todo. Eso sí, no empezó a llamar la atención hasta que cumplió los 30 años. Antes había desarrollado una trayectoria con altibajos en conjuntos de la Tercera catalana y de Segunda B: Premiá, Espanyol B, Badalona, Olot y finalmente Cornellá, donde jugó tres temporadas y media y se destapó como anotador. En la Liga 16/17 aportó 16 goles y en la siguiente hizo 18 en solo 19 partidos, todos dentro de la primera vuelta. Fue entonces cuando otro Segunda B, el Extremadura, se animó a afianzar su condición de aspirante al ascenso y se hizo con sus servicios en enero de 2018. El fichaje fue todo un acierto. Enric siguió en racha de enero a junio –10 tantos más en Liga y uno en la promoción para cerrar la campaña con 29– y la escuadra de Almendralejo conquistó su objetivo.

El salto a Primera

Así pudo debutar en Segunda División. Y no lo hizo nada mal. Enseguida se puso al frente de la clasificación de artilleros de una categoría que dejó antes de lo previsto a golpe de aciertos. En sus primeros 19 encuentros con el Extremadura ya había anotado 15 goles. Ese registro fue todo un aval para que, con 32 años, subiera a Primera con la Liga de Segunda todavía en marcha. Un Huesca sin pólvora confió en la pegada de Gallego para intentar evitar el descenso a LaLiga Smartbank en esa misma temporada, la 2018/19. Enric hizo lo que pudo. Puso de su parte 5 dianas, insuficientes para que los aragoneses se quedaran en LaLiga Santander. Pero a esas alturas ya había demostrado que tenía nivel para jugar en Primera; y ahí siguió, inicialmente como fichaje del Getafe, que pagó 6 millones de euros en el verano de 2019 y donde no tuvo éxito, y a partir del mercado de enero de 2020 como refuerzo del Osasuna, en principio cedido para suplir al lesionado Chimy Ávila y luego en propiedad, tras el pago obligatorio de 2 millones de euros una vez sellada la continuidad del equipo en la máxima categoría.

Esa etapa de dos temporadas y media en Primera, con el Huesca, Getafe y Osasuna, se resume con un balance de 60 partidos jugados, 36 como titular, y 8 goles, los 5 del Huesca y tres con el Osasuna hace dos campañas, en la 19/20. En la posterior se tuvo que conformar con ver portería en una sola ocasión, de penalti, en un 0-6 de la Copa del Rey ante el Tomares.

El noveno fichaje

Desde ayer es futbolista del Tenerife. Es el noveno fichaje de este verano –antes llegaron Juan Soriano, Mellot, José León, Alexandre Corredera, Míchel Herrero, Sergio González de vuelta tras su cesión, Elady y Rubén Díez–, ninguno a préstamo. Luis Miguel Ramis ya tiene a su nueve. Al fin.