Una de las lecturas que se pueden extraer del partido amistoso que jugó este sábado el Tenerife, es que le falta un delantero. Dos, en realidad. No es que sea ningún descubrimiento. El director deportivo Juan Carlos Cordero es el primero en reconocerlo. Y acabarán llegando. El mercado de verano tiene aún un mes de recorrido y los profesionales del gol son los más cotizados.

En el tercer ensayo de la pretemporada – el primero ante un rival de la misma categoría, el Cartagena–, Luis Miguel Ramis jugó de inicio sin un 9. Le encomendó esa misión a un Elady Zorrilla que se enfrentó a su exequipo y, aunque lo intentó, estuvo vigilado. En el tramo final del encuentro, la referencia fue el joven Ethyan. El canterano no fue el único delantero que viajó a San Pedro del Pinatar, pero el otro, Joselu, no cuenta y volvió a quedarse fuera de la convocatoria, lo mismo que Alberto.

La duda está en si la producción ofensiva en este ensayo –solo fue un ensayo– habría sido suficiente para lograr algún gol teniendo a un especialista sobre el césped. Fue un partido sin ocasiones claras, ni para unos ni para otros. Por parte de los blanquiazules, el peligro estuvo casi siempre en las botas de Shashoua; en la primera parte (7’) con una maniobra en el área que tapó Marc Martínez y un posterior disparo que se salió alto (22’); y en la segunda con un doble intento carente de puntería: golpeo cruzado (60’) y otro centrado (64’), ninguno entre los palos.

Pero el balance ofensivo del Tenerife pudo haber sido otro si el árbitro no hubiera anulado un gol de Carlos Ruiz cerca del descanso. El 0-1 no fue tenido en cuenta por fuera de juego. Ahí funcionó la estrategia: balón colgado al área por Míchel y certero remate de Ruiz. Mucho antes había sido el centrocampista valenciano el que había puesto a prueba al portero del Cartagena con el lanzamiento de una falta provocada por Shashoua (3’).

El funcionamiento en ataque no deparó mucho más. En el apartado individual, aparte de la aportación de Shashoua y del discreto papel de Elady, Bermejo participó de principio a fin como extremo izquierdo y demostró que no ha adquirido todavía la chispa que le caracteriza. El barcelonés no pudo empezar a tiempo la pretemporada. Y en la otra banda entró Thierno de inicio tras sus buenos minutos ante el Elche. El canterano pidió el cambio por unas molestias en la segunda parte. Hasta entonces estuvo a la altura de un partido entre dos equipos de Segunda. En ese costado supo entenderse con un Mellot que es algo más que un lateral. También suma en ataque.

Precisamente, el francés repitió dentro del mismo armazón defensivo que eligió Ramis para el anterior test, ante el Elche. No debe ser casualidad que el técnico haya comenzado estos dos partidos con una línea formada por los laterales Mellot y Pomares y los centrales Sipcic y Carlos Ruiz, y con Aitor Sanz y Míchel como mediocentros. Esta vez fue Dani Hernández y no Soriano el portero elegido.

Seguramente conviene ir consolidando la parte de atrás a falta de dos semanas para el comienzo de la Liga –15 de agosto en Fuenlabrada–. Ramis ya tiene mucho trabajo adelantado por la respuesta defensiva que alcanzó la campaña pasada con muchos de los jugadores que siguen a sus órdenes. Eso es algo que se nota, incluso en partidos de ensayo como el de ayer.

Lo cierto es que el Tenerife apenas sufrió para dejar su portería a cero. Llevó el mando en el primer tiempo y solo se vio forzado a dar un paso atrás en algunas fases del segundo, cuando el Cartagena se animó a adelantar su presión.

Antes del descanso, los de Luis Carrión solo consiguieron montar un contragolpe, resuelto con un disparo alto de De la Bella. Y tras el intermedio, obligaron a Dani que interviniera por primera vez en el minuto 57, para que el guardameta sacara a córner un pase lateral.

La sensación de control, mayor en el primer tiempo que en el segundo, se dispersó un poco en la recta final con la sucesión de cambios. Algo normal en estos casos.