Nikola Sipcic lleva dos años en el Tenerife. Sabe lo que es jugar como local en el Rodríguez López con espectadores en las gradas y también competir en casa sin público. Sin lugar a dudas, se queda con la primera experiencia. Y confía en volver a vivirla a partir del 21 de agosto, cuando el Heliodoro abra para recibir al Real Oviedo.

Ayer, en declaraciones a los medios de comunicación del club, aseguró que tanto él como sus compañeros están «felices» por el reencuentro con la afición. «La diferencia es muy grande, vamos a hacerlo mucho mejor», afirmó el serbio.

El defensa reconoció que ha sido «muy raro» competir a puerta cerrada. «Pero ahora volverá la afición y estamos con ganas de jugar en casa».

Al margen de este asunto, Nikola aseguró que el equipo «solo» está centrado en preparar el partido de la primera jornada de Liga en Fuenlabrada.

También tuvo palabras para Javi Alonso, de baja por una grave lesión de rodilla. «Es una pena. Javi es mi amigo, no solo en el campo, y es una pena que se haya lesionado. Le mandamos muchos ánimos», declaró.