El verano exigirá de Juan Carlos Cordero una labor inmensa en la renovación de una plantilla que ‘canjeará’ jugadores caros con escaso rendimiento por fichajes que ilusionen. Hay pocos puestos cerrados para la 21/22. Por empezar por el principio, el Tenerife busca un portero que compita con Dani Hernández, algo que se repite cada año. 

Jon Ander Serantes, Ian Mackay y Tomeu Nadal son los tres últimos nombres asociados a los planes que maneja el Tenerife para completar la posición de portero. Los tres de más de 30 años (el gallego exSabadell es el mayor, con 34), todos con la condición de libres en el mercado y dos de ellos todavía con el amargo sabor de un descenso de categoría. Alguno, con la ventaja de haber jugado ya a las órdenes de Luis Miguel Ramis, como es el caso de Tomeu Nadal, que fue intocable para el técnico tarraconense cuando ambos coincidieron en el Albacete (jugó 39 partidos). A Dani Hernández le buscan competencia, circunstancia que no debe alterar mucho al portero hispano-venezolano, a punto de empezar su octava campaña como blanquiazul, la séptima completa. Dani ha jugado el 75,45% de los partidos de Liga que disputó el equipo desde que le fichó, que han sido un total de 273, de los que él fue titular 206 veces.

El dominio de Dani Hernández de la titularidad desde que arribó de vuelta a la entidad (se formó en la base) ha sido pleno, salvo en la temporada 2019/20, cuando López Garai prefirió a Adrián Ortolá. La razón que movió al cambio fue una característica en particular: el juego con los pies del meta catalán, formado en la escuela de Cruyff en el Barcelona. Cabe detenerse para llamar la atención sobre el resultado de esa apuesta. Ortolá, que patentó sus cualidades debajo de los palos, quedó marcado por sus errores precisamente en las acciones de inicio del juego, en el uso de los pies... Un año después, el autogol en el derbi acabó con su trayectoria en el club. Aquella campaña, Dani solo jugó 6 partidos y tuvo esa oportunidad porque Ortolá regresó lesionado de unas vacaciones navideñas, con un corte en una mano. De resto, no ha habido color. El hispano venezolano ha tenido competidores de la casa (Roberto, Carlos Abad-Hernández, Ángel Galván e Ignacio Otaño) y otros de fuera (Ismael Falcón, Ortolá y Serantes) pero siempre ha terminado jugando. Los tres últimos partidos, en los que jugó el meta de Baracaldo, obedecen al deseo de Ramis de premiar su trabajo como suplente, no se pude interpretar que Serantes haya ganado la carrera a Dani, aunque tal vez le ficharon con esa intención. No es ningún secreto que el portero titular del Tenerife ha tenido seria contestación dentro y fuera, pero ha podido con sus detractores e incluso ha ido fortaleciendo su titularidad en los últimos dos ejercicios. Esta temporada dejó la puerta a cero 12 veces...

Ahora, el Tenerife, que amplió su contrato antes de que tuviera que ejecutar una cláusula por partidos jugados, busca un nuevo competidor para uno de los puestos que menos dudas genera. Dani, que en octubre cumplirá 36 años, prolonga una sombra muy alargada.