Un triunfo más. El Tenerife garantiza su permanencia de forma casi matemática, si gana un partido de los cuatro que quedan. No ha cambiado casi nada respecto a la situación en la que estaba el equipo de Ramis antes de esta jornada, a pesar de la derrota del viernes. La mala racha del conjunto blanquiazul, que solo ha sumado tres de los quince últimos puntos, ha sido ‘respondida’ por los equipos de la zona baja de la tabla clasificatoria con una secuencia de resultados que hace posible que la brecha se mantenga en seis puntos de margen. La situación responde a los planteamientos teóricos para esta Liga de 22 equipos, que no siempre son útiles luego en la práctica. Según esa teoría, alcanzar la cota de los 50 puntos garantiza la permanencia, esta vez será así. El Tenerife es inalcanzable ya para al menos cuatro equipos si suma tres puntos más. Es posible, incluso probable, que los equipos que lleguen a los 48 puntos estén fuera de cualquier complicación de descenso en este último tramo, con lo que bastaría con un empate. Parece improbable que los rivales que no han sido capaces de ganar más de un partido de casi cada cuatro que han jugado hasta ahora (el Logroñés 10 de 38 y el Castellón y el Alcorcón, 11), sumen más de nueve puntos en estas cuatro jornadas que quedan. Con menos de nueve créditos, ninguno de los que tienen 41 alcanzaría al Tenerife si los blanquiazules son capaces de ganar uno de sus encuentros restantes. Incluso, en el caso del Castellón, necesitaría 10 puntos sobre 12 posibles porque el Tenerife le aventaja en el average.

Dos, más hundidos.

La situación concreta es que la barrera de la permanencia está en los 41 puntos de Logroñés (que visita a Leganés y Almería y recibe a Fuenlabrada y Las Palmas), tras caer ayer goleado por el Girona, y de Castellón (juega en casa ante Ponferradina y Rayo Vallecano y fuera de Castalia ante Zaragoza y Málaga), que dio un serio paso atrás en Cartagena. Los dos se quedan con la misma puntuación y el golaverage igualado. Hay más implicados en medio, Alcorcón y Cartagena con 42 y hasta el Zaragoza, con 44.

La primera parada puede ser definitiva. La visita del domingo a Sabadell, que podría servirle al Tenerife para alcanzar la cota deseada, aunque este encuentro de la Nova Creu Alta pasa por ser el más delicado teniendo en cuenta que el equipo de Antonio Hidalgo se está jugando también su futuro en la categoría. El Tenerife descartaría directamente a los arlequinados ganando en su campo, como sucedió en su última visita. Se da la curiosa circunstancia de que en aquella oportunidad, el equipo liderado por el bigoleador Suso Santana, certificó en campo sabadellense la permanencia de la mano de Raúl Agné. Fue el 20 de mayo de 2015, casi exactamente seis años después, el equipo blanquiazul vuelve a Sabadell en una situación algo más desahogada, pero con el mismo objetivo.

Sipcic mantiene el optimismo

Nikola Sipcic dijo ayer en los medios oficiales del club blanquiazul que la derrota del viernes deja cosas positivas, como la manera de defender del equipo. “Tras la roja y con un jugador menos, es difícil. Aún así, defendimos bien, pero ellos aprovecharon la que tuvieron. Sufrimos en inferioridad, pero competimos hasta el final. Incluso, tuvimos dos o tres ocasiones claras contra un rival importante”. Sobre el objetivo de amarrar la permanencia cuanto antes, entiende que “si seguimos en este ritmo, seguro que saldrá bien. Quedan cuatro partidos más y doce puntos. Iremos a ganar. Cuando pasan cosas así, toca juntarse más que nunca”. De cara al próximo reto en la Nova Creu Alta, destacó que empezarán hoy «a preparar el partido contra el Sabadell, concentrados al máximo, para entrar a los partidos como nosotros sabemos. Si ganamos, será todo más sencillo”, señaló.