En respuesta a una reclamación presentada por accionistas del CD Tenerife a título particular, el Consejo Superior de Deportes (CSD) ha confirmado esta semana que la permanencia de Miguel Concepción en el cargo de presidente de la entidad blanquiazul será inviable si no prospera el recurso de casación que presentó ante la Sala segunda del Tribunal Supremo, después de que fuera condenado el pasado 20 de octubre a 23 meses de prisión por un delito de estafa agravada, con el atenuante de dilaciones indebidas; es decir, si el dirigente agota todas las alternativas y la citada sentencia es firme.

En concreto, el colectivo Pequeños Accionistas, creado a finales de 2020, reconoció ayer que tomó la iniciativa de contactar con el Consejo Superior de Deportes para poner en aviso a este organismo sobre la decisión de los magistrados de la Sección Sexta de la Audiencia Provincial de Santa Cruz de Tenerife y conocer las consecuencias que se podían producir en el club. Esas dudas se despejaron con una carta cuyo contenido fue desvelado por la SER.

Entre otras cosas , el CSD recuerda que “no pueden ser administradores los condenados por delitos contra el patrimonio o contra el orden socioeconómico”, condición que, por otra parte, recogen los estatutos del club.

En el escrito, firmado por Ángel Luis Martín Garrido, subdirector general de Régimen Jurídico del Deporte, se detallan las “consecuencias” que se desencadenarían con una sentencia firme en el caso que afecta a Miguel Concepción. Según el artículo 224.1 del Real Decreto Legislativo 1/2010, “los administradores que estuviesen incursos en cualquiera de las prohibiciones legales deberán ser inmediatamente destituidos, a solicitud de cualquier accionista”.

Es más, el CSD asegura que en el momento en el que tenga “constancia de la firmeza de la sentencia” de la Audiencia Provincial de Tenerife, informará al CD Tenerife y a LaLiga “a efectos de que tomen las medidas pertinentes en el marco de sus competencias”.

“Especulaciones malintencionadas”

Miguel Concepción no guardó silencio y pidió “evitar especulaciones malintencionadas”, al tiempo que recordó que el proceso de casación que presentó llevará su tiempo. “Al respecto de las noticias aparecidas en algunos medios y que pretenden mancillar mi nombre en relación con la gestión del Club Deportivo Tenerife SAD durante los últimos 15 años, se refieren a una mera hipótesis que aún no ha sucedido al estar fundadas en una sentencia de Audiencia que aún no es firme. No acostumbro a opinar sobre hipótesis que no han sucedido y, además, tengo pleno respeto al Tribunal Supremo por su trabajo en el proceso de casación, que llevará su tiempo. Creo que todos deberíamos evitar especulaciones innecesarias y malintencionadas sobre situaciones que aún no han sucedido y que pueden no llegar a suceder”.