Jugar un partido completo podría ser algo rutinario para un futbolista profesional, pero no todos viven esa experiencia con frecuencia. Es el caso de Valentín Vada. El argentino participó de principio a fin en la eliminatoria de la Copa del Rey del pasado miércoles ante el Castellón, rompiendo así una racha que iba camino de alcanzar el año de duración. De hecho, no disputaba los 90 minutos de un encuentro oficial desde el 29 de febrero de 2020, en un Cádiz-Almería.

La noche fue perfecta para Vada, ya que marcó su primer gol con el equipo blanquiazul y contribuyó en el pase del Tenerife a los dieciseisavos de final de la Copa del Rey. “Estoy contento por la clasificación”, confesó. “El entrenador nos dice que todos los partidos son importantes y que todos los jugadores también lo somos, y eso nos mantiene motivados y concentrados a todos, con el objetivo de ganar cada vez”, dijo a los medios de comunicación del club. “Le di las gracias al míster por darme esos 90 minutos que hacía tanto estaba precisando para seguir agarrando el ritmo y sentirme mejor en lo personal”, añadió el jugador cedido por el Almería.