Un 2 de julio de 1989 cambió el rumbo del CD Tenerife para siempre. Ese día es el del segundo ascenso en la historia de la casi centenaria entidad blanquiazul y la puerta a la época dorada, una década en Primera con dos participaciones en la Copa de la UEFA y unas semifinales de Copa del Rey entre otros logros. Si hoy se sueña con un Tenerife grande, que vuelva a estar en la élite, es por lo que consiguieron los héroes de la temporada 1988/1989. Por eso, el periodista Luis Padilla creía necesario escribir sobre esta hazaña un libro que es, en realidad, “un acto de justicia”.

Así lo calificó ayer, durante la presentación de esta obra de 224 páginas, con 90 fotografías y 24 ilustraciones de Juan Galarza. En la misma, el primer capítulo sirve como relato de la campaña antes de pasar a 24 episodios dedicados a cada uno de los protagonistas: los 22 jugadores, el entrenador Benito Joanet y el presidente Javier Pérez. “En cada apartado, hay una entrevista realizada en los últimos meses, excepto a Rommel Fernández y a Javier Pérez. Incluso tuvimos la suerte de hablar con Joanet antes de que nos dejase”, explica el autor.

Padilla, un experto conocedor de la historia del club y un intachable periodista con más de tres décadas de trayectoria profesional, “debía” a todos los birrias un monográfico así. La vicepresidenta del Tenerife, Milagros Luis Brito, ejerció como maestra de ceremonias y presentó lo que considera “una reivindicación” de una conquista deportiva que está en el corazón de muchos aficionados, pero que los más jóvenes desconocen en gran medida.

Dos de sus protagonistas directos, Toño Hernández y Quique Medina, participaron en la presentación. Miembros del área deportiva profesional y de filiales respectivamente, fueron miembros de aquella plantilla 88/89. “Logramos lo que nadie en esta isla pensaba que podíamos hacer porque para ver la Primera División, en aquellos tiempos, te ibas a Las Palmas o a la Península”, esboza Medina en su primera intervención.

Pasaron casi tres décadas entre el primer y el segundo ascenso a la máxima categoría. Los dos coinciden en señalar que el inicio de la temporada fue “difícil”. Pero que a medida de que avanzaba cobraron conciencia de lo que tenían entre manos. “Nos dimos cuenta de que podíamos hacer algo inolvidable”, reconoce Toño quien destaca el ambiente que se vivía en el vestuario como una de las claves: “Se empezó con ilusión, pero con poca fe. Lo que pasa es que a las tres semanas teníamos un grupo de compañeros y amigos que hicieron más grande al equipo”.

En todo ello tuvieron un papel protagonista tanto Benito Joanet como José Antonio Barrios, que ejercía como director deportivo por entonces. El cargo, eso sí, no era tan rimbombante como en la actualidad. “Hicieron una dupla fantástica para construir el equipo”, reivindica Medina describiendo a la plantilla como “una mezcla de jugadores contrastados con gente de la casa, que tenía mucho corazón”. El sentimiento blanquiazul, que creció “desde pequeñitos”, permitió superar retos.

“El trabajo que hizo Joanet, junto a Justo Gilberto y Miguel Feria, nos hizo sentir mejores de lo que éramos”, recuerda el entonces defensor tinerfeño. En la figura del entrenador se detiene el grancanario para explicar que “estaba muy encima, nos transmitía seguridad y tranquilidad, te decía cuatro cosas que a veces te molestaba. Pero era un padre o como ese tío que siempre te cuida”.

La presentación sirvió como adelanto de un libro en el que se cuenta lo que sucedió en el “motín del Maritim”, cuando la plantilla abandonó la concentración al no llegar a un acuerdo con Javier Pérez por las primas antes de la promoción contra el Betis. También la violencia que usaron los verdiblancos para intentar la remontada en el partido de vuelta de aquella histórica eliminatoria. “Aquella tarde nos dio patadas hasta el utillero”, bromea Toño que tuvo la sensación de “jugar contra doce” por la permisividad del árbitro Ramos Marcos.

Medina desvela algún detalle como que tuvieron que “suscribir seguros privados porque la vuelta se jugó ya finalizada la campaña”. Un sinfín de claves y secretos, al descubierto.