Hace poco más de un año, en septiembre de 2019, el Tenerife visitó el estadio Carlos Belmonte, también un domingo por la mañana, y se marchó con un contundente triunfo, por 0-4. En el área técnica visitante se movió Aritz López Garai. A su lado, un impotente Luis Miguel Ramis asistió a la goleada encajada por su equipo en ese entonces, el Albacete. Hoy, en otro Albacete-Tenerife, los mismos entrenadores volverán a coincidir en la recinto manchego, pero lo harán en los banquillos opuestos.

El Albacete fue el segundo club de Ramis en LaLiga Smartbank. Tras adquirir experiencia en el Almería, fue elegido por el tinerfeño Mauro Pérez para que liderara un proyecto que estuvo cerca de acabar con el ascenso a Primera División. Después de quedar cuarto, el equipo manchego cayó en las semifinales del playoff ante el Mallorca. Los resultados no fueron los mismos en el curso posterior y el tarraconense fue despedido en la vigésima sexta jornada.

La experiencia de López Garai en el Tenerife duró solo 16 partidos, los primeros de la temporada 2019/20. Tras quedar en paro, recibió la oferta del Albacete para relevar a Lucas Alcaraz a partir de la quinta fecha del presente curso.

No es frecuente que un partido brinde una curiosidad de este tipo. De hecho, la última vez que un encuentro protagonizado por el Tenerife tuvo en el lado blanquiazul a un míster que había trabajado antes en el rival, y ese adversario estuvo dirigido por un preparador con pasado blanquiazul, fue el 11 de octubre de 2014, cuando el Tenerife de Álvaro Cervera perdió ante el Recreativo de José Luis Oltra por 0-2 (el primer gol, de Joselu Moreno). Cervera había entrenado al Decano en la campaña 2011/12 y Oltra dejó huella en el representativo entre 2007 y 2010.

Además de verse las caras en el citado 0-4, López Garai y Ramis se enfrentaron cuatro veces como entrenadores. En la Liga 17/18, el Reus de Aritz derrotó al Almería de Luis en la ida y en la vuelta. Y en la 18/19, el tarraconense se vengó con el Albacete venciendo al Numancia (1-2), para dar paso luego a un 0-0 en el Carlos Belmonte.

Aritz López Garai se mostró muy sincero en la rueda de prensa que ofreció ayer al referirse a la mala racha en la que ha entrado su equipo. “Si fuese aficionado del Albacete, estaría preocupado y triste”, admitió antes de asumir toda la culpa. “Que no se gane los partidos es mi responsabilidad; el único responsable soy yo”, declaró. “No es impotencia, es frustración. Preparas el partido, sales convencido de que va a ser el día y sin que pase nada, se desmorona todo”, lamentó Aritz. “No podemos afrontar el partido ante el Tenerife con la cara de que algo nos va a pasar”, dijo sin olvidar que su rival “viene con problemas”.

En declaraciones a los medios de comunicación del Tenerife, Luis Miguel Ramis analizó ayer el momento en el que se encuentra su equipo. “Antes de venir, sin haber respirado el ambiente del vestuario, ya estaba convencido, y el grupo no ha hecho sino corroborarlo”, dijo sobre la “predisposición” de los futbolistas y sus “posibilidades” para conseguir que el colectivo mejore. “Lo que tenemos que hacer es llevar esas posibilidades al límite, no hay otro camino”, apuntó. “Veo al equipo físicamente recuperado y emocionalmente preparado. Ahora tenemos que ganar en más minutos de calidad y ser fuertes en lo que queremos”.