El CD Tenerife presentará, por primera vez en muchas temporadas, un incremento notable de sus números rojos. En la junta general ordinaria de accionistas, a celebrar el 28 o el 29 de diciembre de forma telemática, se verán reflejados unos beneficios de 1.882.409,42 euros (después de impuestos) en el ejercicio 19/20. Sin embargo, su deuda se verá incrementada en 2,9 millones con respecto al año anterior. Pasará así de 11.597.648,40 a 14.453.023,89 euros.

Según refleja el informe de auditoría, este incremento tiene que ver con “las inversiones efectuadas en la Ciudad Deportiva y con la política de prudencia adoptada con motivo de la crisis del Covid-19, que aconsejó firmar un préstamo ICO del que se ha dispuesto 689.416,97 euros, y aplazar parte de las primas de los jugadores a la temporada 2020/2021”. Se refiere aquí al acuerdo alcanzado con los futbolistas para diferir pago al menos hasta enero del próximo año.

En este contexto negativo, el asunto queda patente en la deuda a corto plazo (a pagar antes del 30 de junio de 2021), fijada en algo más de 3,4 millones. De ellos, una cantidad que supera los 1,9 millones va destinada al personal deportivo. Las entidades de crédito deberán percibir 934.563,99 euros y las administraciones públicas un total de 652.071,30. Mientras, la deuda a largo plazo asciende a 6,3 millones. La mayor parte corresponde al préstamo de La Caixa (5,7 millones a pagar hasta mayo de 2027). También cuenta la parcela deportiva con cantidades a abonar. En concreto, los 480.313,69 que aún le debe al Genk belga por el traspaso de José Naranjo y los 100.000 euros que percibirá el Real Zaragoza por la cesión de Dani Lasure y la correspondiente penalización por no disputar la cantidad de minutos recogida en su contrato.

En el capítulo de ingresos, viene recogido el traspaso de Jorge Sáenz de Miera al Valencia CF por un montante superior a los 2 millones de euros. Sin embargo, se hacen constar como hechos posteriores al cierre las operaciones de salida de Luis Milla y Filip Malbasic. El primero, vía abono de la cláusula de rescisión por parte del Granada CF, supuso un beneficio de 5 millones de euros. El segundo, con la opción de compra obligatoria que asumió el Cádiz CF por su ascenso a Primera, permitió ingresar 600.000 euros. Pero estos 5,6 millones vendrán incluidos en las cuentas del ejercicio 20/21.

Además, el Tenerife vio reducidos sus ingresos en el apartado de abonos y entradas desde los casi 1,7 millones de la temporada 18/19 a los casi 1,4 de la 19/20. El cierre de los estadios en los cinco últimos compromisos como local resultó significativo en este apartado. La publicidad, tanto estática como dinámica, sí registró un ligero aumento para llegar a 5,1 millones. Las cantidades percibidas desde el Cabildo (1.775.000) y el Gobierno de Canarias (1.500.000) responden a contratos firmados en años anteriores.

En cuanto a los gastos, el personal sigue ocupando en torno al 50% de la cifra de negocio. Así, la plantilla inscribible (jugadores, cuerpo técnico y dirección deportiva) cobró 6,2 millones por los casi 1,9 de la no inscribible (otros asistentes, filiales y resto de personal). Otra de las partidas más elevadas corresponde a la obra de la Ciudad Deportiva. Aunque el convenio vigente con el Cabildo establece un reparto 75%-25%, la SAD blanquiazul alcanzará el millón de euros de inversión en la primera parte de su esfuerzo económico.

Las cuentas del ejercicio 19/20 reflejan además un incremento considerable de la tesorería hasta llegar a los 1.689.120,29 euros. El crédito ICO solicitado, con la partipación de CajaSiete en la operación, tiene mucho que ver. La entidad blanquiazul consideró que esta herramienta restaría incertidumbre a la hora de afrontar pagos en un situación de pandemia que podía ver menguados sus ingresos. No obstante, partidas como la de los derechos de televisión se mantuvieron al alza hasta llegar a 6.864.660,68 euros. La compensación que LaLiga negocia con los operadores llegará en el siguiente ejercicio.

El informe de gestión disponible para los accionistas del CD Tenerife desde ayer advierte sobre un “descenso moderado” en los ingresos previstos para la presente temporada, “debido a la prohibición de realizar partidos en el estadio con público, viéndose resentidos los ingresos por taquillas y abonos”. De hecho, en las previsiones aparece una cifra que rebaja los 1,4 millones de la 19/20 a unos optimistas 0,9 para la 20/21. También baja la cantidad prevista a ingresar en publicidad de 5,1 a 4,1 millones. El presupuesto global pierde 2 millones, cayendo desde los 14 hasta los 12. La única partido de gastos que se incrementa para el actual curso tiene que ver con los gastos de la plantilla inscribible, que alcanzan los 8,3 millones (por los 6,2 en la 19/20). La previsión de la entidad blanquiazul apunta a unos beneficios de 890.000 euros, algo que deberá ajustarse en función de las reducciones no previstas de ingresos. El uso de los 5,6 millones percibidos por Milla y Malbasic marcará un ejercicio contable difícil, el que más desde el retorno al fútbol profesional en 2013. Una de las estrategias que podría haber llevado a cabo el Tenerife pasa por no derivar todo ese dinero al incremento de su gasto deportivo, reservando parte del mismo para otros apartados. La reanudación de las obras en la Ciudad Deportiva tendría, en ese caso, la etiqueta de favorita.

Presupuesto a la baja en la 20/21