Máxima alerta con Jerrick Harding

Se lamentaba Txus Vidorreta, hace apenas dos jornadas, de que su equipo fue «demasiado flojo» en la defensa del uno contra uno de los pequeños del Joventut. En especial ante un Dotson que solo en la segunda parte del encuentro produjo 17 puntos y tres asistencias siendo clave en un parcial que llegó a ser de 35-16. Ahora, los directores de juego y resto de exteriores del club aurinegro pasan una reválida incluso más complicada.

Un examen con nombre y apellidos: Jerrick Harding. El base-escolta de Kansas no solo se ha convertido en el líder ofensivo de su equipo –más aún tras la baja por lesión de Shannon Evans– sino que también es el jugador más destacado de toda la ACB en esta faceta. Así, tras 11 partidos, el base norteamericano promedia 22,4 puntos, prácticamente siete más que el segundo jugador más prolífico en el citado apartado: Dylan Ennis, del Murcia, con 15,5 por duelo.

Sin haber bajado de los 12 puntos en ninguno los 11 duelos que ha jugado este curso (a los que suma los siete últimos de la pasada campaña, tramo en el que promedió más de 21 tantos), Harding se mueve en unos números que no se habían registrado en la ACB desde hace exactamente dos décadas. Muy cerca se quedó Prepelic (22,3) en la interrumptus 19/20, lo mismo que Edwin Jackson en la 16/17 (21,4). El antecedente que mejora los registros del jugador del Andorra está en manos de Charlie Bell, que en la 04/05 y en las filas del Breogán, se fue hasta los 27 puntos de media.

Esa facilidad anotadora de Harding ya ha quedado patente en varias ocasiones desde su llegada a ACB. Así, en su primer año, en las filas del Manresa, le hizo 41 puntos al Betis. Ya este curso, en la cuarta jornada, alcanzó los 30 frente al Valencia, para tocar techo hace solo dos jornadas contra el Manresa, cuando anotó 36 tantos para irse hasta los 40 créditos de valoración, lo que le ha aupado hasta el tercer lugar del ránking de más valorados de la Liga Endesa 24/25.

El promedio del estadounidense en sus tres partidos más recientes es de 26 puntos. Solo un ejemplo más de sus virtudes ofensivas y que, salvo sorpresa, lo convertirán en el máximo anotador de 2024. Un año natural en el que el de Kansas ya ha sumado 572 puntos en solo 29 encuentros. Su más inmediato perseguidor es Dylan Ennis, que está en 549, pero en 41 choques.

La capacidad de Harding para ver el aro contrario es directamente proporcional a la cantidad de balón que tiene en sus manos. Así, el exterior del conjunto del Principado lanza nada menos que casi 14,8 veces por encuentro: 9,6 de dos y 5,2 desde más allá del 6,75. Tampoco nadie se le acerca en esta faceta. Hasta su lesión Charlie Moore (Breogán) hacía 12,3 por compromiso. En el CB Canarias, Huertas es el más prolífico, con casi 10,8 lanzamientos por duelo. Ya el pasado ejercicio promedió 12,6 tiros por choque. Eso sí, su cadencia es casi calcada: un tiro cada 1’50’’ que está en pista este año, frente al 1’51’’ del curso anterior.

Al contrario que en la hemorragia de puntos de Harding, sí hay antecedentes más cercanos en el tiempo de jugadores más chupones. Lo fue, por ejemplo, Askia Booker en la 19/20, con 18,1 lanzamientos, un guarismo inusual que se explica por su tendencia al tiro de tres: 10,3. Hoy el Canarias debe alejar a Harding de esas cifras.