«Uno de mis primeros partidos que jugué en España fue contra el [Lenovo] Tenerife; ocurrió hace dos años en pretemporada y recuerdo que me impresionó el nivel de intensidad en defensa y en ataque». Así se expresó ayer Dusan Ristic para hablar de las impresiones iniciales que tuvo del que ahora es su equipo. Hablaba el pívot serbio del amistoso disputado, con el Fuenlabrada, ante el cuadro lagunero el 5 de septiembre de 2021 contra el club isleño dentro del Torneo de Getafe.
Pero más allá de eso, y metiendo en la ecuación tanto «varios partidos» disputados posteriormente en la ACB y los entrenamientos que ha podido realizar estos días desde su llegada, Ristic se queda con la generosidad del plantel canarista. «Cuando tuve la oferta del Tenerife recordé esa química, y que el equipo pone sus intereses por encima de los de las individualidades», especificó el de Novi Sad.
Para Ristic esa forma de entender el baloncesto que tiene el Canarias es uno de sus secretos para «mejorar cada temporada» y también «estar al nivel de los equipos grandes». «Estoy muy contento de formar parte de este club porque realmente creo que el estilo de juego de Vidorreta me viene bien para aprender y mejorar, y luego contribuir a que el equipo gane la mayor cantidad de partidos posibles y alcance sus objetivos», señaló el pívot a modo de propósito.
Cuestionado por sus diferencias respecto a Shermadini y Guerra, sus compañeros de posición, Ristic cree que «todavía es algo complicado de responder». «Los tres somos grandes y podemos aportar diferentes aspectos en el parqué», señaló el serbio, que menos se mojó sobre la teórica dificultad de tener minutos para los cincos. «Esa es una respuesta para el entrenador. Yo trataré de hacer bien en los entrenamientos y en los partidos; hacer lo que el técnico me pida», comentó.
Apalabrado su fichaje desde hace algunos meses, reconoce Ristic que cuando tuvo encima de la mesa la oferta del Lenovo Tenerife, pidió referencias a Álex López, con el que coincidió en su primera temporada en el Fuenlabrada. «Sí, hablé un poco con él y me contó todo lo bueno que tenía el club, la isla, la gente... Fue una conversación muy corta», revela el pívot en relación a lo fácil que lo tuvo para tomar una decisión.
Determinación, la de recalar en la Isla, que Ristic considera acertada a tenor de lo vivido en estos primeros días. «Parece un muy buen grupo y todos los compañeros me han ayudado tanto dentro como fuera de la pista», admite. «Todos ponen al servicio del equipo sus cualidades individuales», vuelve a repetir Ristic. Ahora él quiere ser uno más en esta intendencia aurinegra.
«Llego en muy buena forma»
Asegura Ristic llega «en muy buena forma» tras su paso por el Mundial y pese a «dejar de jugar varios partidos». El serbio dice que trabajó «muy fuerte» el verano para poderse ganar un hueco en su «selección al lado de Nikola Miluninov y Filip Petrusev, dos de los mejores pívots de Europa estos años». «La plata fue una gran experiencia, pero forma parte del pasado. He podido descansar algo y ahora me centro en el equipo para mejorar. Estoy aprendiendo los sistemas, que tienen muchos detalles y son complejos. Espero que la transición sea fácil y corta», explicó.