Tres victorias en otros tantos encuentros de Liga Endesa y una incontestable sensación de que nada ha cambiado en los automatismos y señas de identidad que tan grandes réditos le han aportados en estos últimos cursos, presiden este inicio de ejercicio 22/23 en el Lenovo Tenerife. Un rendimiento que no es nuevo, pero que sí puede sorprender a tenor de una pretemporada limitada en lo que a efectivos y encuentros de preparación se refiere. Ahora, superado el tramo que mayor preocupación e incertidumbre podía haber generado en su cuerpo técnico, el cuadro canarista tratará de darle continuidad a su buena puesta en escena. A ser posible, sin que nadie le derroque desde la atalaya del liderato. Su siguiente prueba, esta tarde, contra un Obradoiro que históricamente se le suele dar bien, pero que viene demostrando en estos primeros pasos ligueros que está más que acostumbrado a su obligada reinvención de cada año.
Como ocurriera hace una semana en la victoria del Buesa Arena contra el Baskonia, la única baja que tendrá hoy Txus Vidorreta es la de Fran Guerra. Una ausencia que debería provocar escasas dosis de inquietud. Por un lado porque Diagné parece haber dejado atrás los problemas físicos de las últimas semanas, y también porque, en el que será su tercer encuentro tras salir de una pequeña lesión, Gio Shermadini tiene ante sí la ocasión de acercarse a su versión más habitual. Aquella que le ha encumbrado como uno de los jugadores más determinantes de la competición. Y si con los dos cincos disponibles no le basta, el Canarias ha demostrado tener presta una solución de urgencia que va camino de convertirse en un más que socorrido recurso: tirar con Doornekamp y Abromaitis como solvente pareja en el juego interior. Una versatilidad que tiene mucho que ver en un casi milimétrico reparto de minutos, puesto que en estos tres partidos nadie supera los 25:14 de media.
Delante tendrán hoy los aurinegros a otro conjunto, el Obra, que también puede darse por satisfecho de cómo le están yendo las cosas en este comienzo de la 22/23: dos triunfos ante Zaragoza y Girona –ambos teóricos rivales directos en la lucha por la permanencia– y la buena imagen ofrecida contra el Real Madrid. Con seis piezas nuevas y de cierta relevancia –entre todos han jugado 367 minutos del total de 600 de todo el equipo– el líder de los santiagueses es el bosnio Dragan Bender. El que fuera número 4 del draft con los Phoenix Suns en 2016 (acumuló 187 partidos en la NBA) ha asumido galones casi desde que aterrizó en Santiago y ya promedia 17,7 puntos y 5,7 rebotes para ser, hasta el momento, la quinta mejor marca en valoración de la ACB, gracias a sus 19,3 créditos de media. Complicada papeleta para los interiores del Lenovo, más aún con la presencia del joven lituano Marek Blazevic –promedia 7,3 rebotes–, que tras asomar la cabeza el año pasado con el Zalgiris quiere ser una de las sensaciones de esta Liga Endesa. Otro examen para poner a prueba la capacidad de carburación canarista.
En busca de igualar el mejor arranque de la nueva era
Sin llegar a ser una marca sideral, el Lenovo Tenerife igualaría hoy el mejor arranque de temporada en esta nueva era en la élite, que en la campaña 22/23 cumple su undécima temporada seguida. Los de Vidorreta sumarían, en caso de ganar esta noche, la que sería su quinta victoria en otros tantos duelos (cuatro en ACB y una en Champions), un registro que los aurinegros solo alcanzaron una vez, concretamente en el ejercicio 16/17. Hace seis años los laguneros también sacaron adelante sus cuatro primeros compromisos ligueros (Obradoiro y Betis en el Santiago Martín, y Gran Canaria y Joventut a domicilio), más el duelo inaugural de la BCL que le midió a la Cibona de Zagreb. Ese 5-0 se vio truncado, el 23 de octubre de 2016, con motivo de la visita al Unicaja. En los 10 precedentes más recientes, el Canarias solo llegó otra vez invicto a estas alturas de la Liga Endesa. Ocurrió en el ejercicio 20/21, cuando saldó de forma satisfactoria sus siete primeros compromisos ligueros. No fue, sin embargo, un arranque inmaculado, ya que los tinerfeños cedieron en su debut oficial con motivo de la semifinal de la Supercopa ante el Real Madrid, y también tropezaron contra el Zaragoza en los cuartos de la Final Eight de la BCL.
