Con 33 puntos, cuatro rebotes y siete asistencias para 38 créditos de valoración, Marce Huertas hizo el curso pasado, contra el Obradoiro, el mejor partido de toda su trayectoria en la ACB. Una master class que resultó clave en el triunfo aurinegro ante el santiagués en el Santiago Martín. Una faena de la que habrá tomado buena cuenta el técnico de los gallegos, Moncho Fernández, para evitar hoy otro roto. En la llegada a su plantilla del francés Leo Westermann puede estar la solución. En estos últimos años Marce ha sufrido cuando le defienden jugadores muy físicos o bien altos. Es el caso del base galo del Obra, de 1,98 metros. Pero en el Lenovo no quieren sorpresas y preparan un antídoto.

«Están jugando muy bien, con mucho ritmo, tienen una gran capacidad anotadora y con la llegada de Westermann se han endurecido mucho», dijo ayer Txus Vidorreta, que calificó al francés como «un jugador de perfil Euroliga, con casi dos metros de altura, lo que les da físico y superioridad a la hora de jugar el bloqueo directo porque domina desde las alturas muchas facetas del pase». Cuestionado por si teme que la envergadura del director de juego de su rival de hoy ahogue al paulista, el preparador canarista afirmó tener armas para responder a esta posible táctica. «Estamos trabajando toda la semana pensando en las características especiales que puede tener la defensa del Obradoiro con Westermann, pero con la llegada de Jaime nosotros tenemos más manejadores, por lo que nuestra línea de creación también es más amplia y con diferentes virtudes», señaló en este sentido.

Pero no solo le preocupa a Vidorreta la influencia en el juego de Westermann, ya que, a su atender, «Paige y Bender son muy buenos fichajes, y Blazevic es un pívot móvil», mientras que «los hermanos Scrubb fueron claves en la parte final». «Es una plantilla muy mejorada», dijo como comparativa de lo que fue el Obra del pasado curso.

Ya en un análisis de rendimiento propio, Vidorreta considera que –pese a ser el segundo conjunto que menos posesiones se deja por el camino–, el Lenovo Tenerife tiene que «limitar el número de pérdidas que se producen por errores propios». «Cuando son virtudes del rival no puedes decir nada, pero estamos regalando algunos balones que no debemos, tanto en primera línea después del bloqueo directo, como también tras rebotes ofensivos», reconoció, si bien destacó que, en líneas generales, los suyos están «jugando con mucho equilibrio». «Hay muchas más cosas positivas que negativas», concluyó.