La sensación de inferioridad mostrada el sábado por el Lenovo Tenerife en su estreno liguero contra el recién ascendido Río Breogán fue más que manifiesta. Salvo en los compases iniciales el conjunto lagunero fue siempre a remolque de un oponente cargado de deseo y mucho más intenso que los de Vidorreta. Se explican seguramente así varios de los guarismos que dejó la estadística del choque. Y es que los aurinegros recibieron 19 puntos después de cometer una pérdida, y también vieron como su rival les hacía otros 15 tantos en segunda oportunidad tras rebote ofensivo. En total 34 puntos casi regalados.
Bell-Haynes, con seis contraataques, fue el que más rédito sacó de la displicencia canarista
Tal vez lo más llamativo del primero de los citados registros es que esos 19 puntos llegaron tras haber cometido los canaristas únicamente 11 pérdidas, lo que significa que prácticamente cada uno de esos balones que se dejó por el camino el conjunto tinerfeño fue penalizado con canasta. O analizado desde otra perspectiva: el balance defensivo del Lenovo Tenerife fue muy deficiente. Y precisamente de este aspecto del juego ya había hablado Txus Vidorreta días antes de la Supercopa como principal detalle a pulir para evitar males mayores. El sábado, sin embargo, un recién ascendido puso al descubierto todas esas miserias. Bell-Haynes, con seis contraataques, fue el que más rédito sacó de la displicencia canarista.
Pero la vía de agua del conjunto tinerfeño no se limitó a su incapacidad para correr hacia detrás, ya que también se mostró inferior debajo de los tableros, sin estar cómodo en ninguna de las dos zonas. En ataque entre Shermadini y Guerra –maniatados en constantes ayudas– acumularon un 4/12 en tiros de dos, aunque fue en defensa donde más deficiente fueron sus prestaciones. Así, el Breogán hizo 40 puntos en la pintura (solo 30 del Canarias) y a la misma vez ganó la pelea por el rebote (39-33), especialmente en aro ajeno. Ahí, los de Paco Olmos capturaron un total de 16 rechaces ofensivos que luego tradujeron en 15 valiosos puntos. En total, el Lenovo Tenerife saldó su estreno liguero en la campaña 21/22 con 34 puntos que podría catalogarse como regalados. En todo el curso pasado solo una vez, en la victoria del Barça en el Santiago Martín (72-96), el conjunto lagunero se movió en esos registros. Alejarse de ellos y no ser tan dadivoso ante los futuros rivales será clave si el conjunto tinerfeño desea vivir un año similar al anterior.
