Por segundo año consecutivo, el pabellón Santiago Martín será la sede de la Supercopa Endesa. Las semifinales, en las que los cabezas de serie, FC Barcelona y Real Madrid, se cruzarán con Lenovo Tenerife o Valencia Basket, se jugarán el sábado 11 de septiembre. Al día siguiente se disputará la final.

La incógnita está en las gradas | | ANDRÉS GUTIÉRREZ

La competición, presentada ayer en el Auditorio Adán Martín con la presencia del máximo mandatario de la ACB, Antonio Martín, y del presidente y el vicepresidente del Cabildo de Tenerife, Pedro Martín y Enrique Arriaga, deja en el aire una única incógnita. ¿Podrán entrar espectadores al pabellón de Los Majuelos? En septiembre de 2020 no fue posible. La pandemia del coronavirus provocó que la Supercopa se celebrara a puerta cerrada. Ahora, los organizadores del torneo que abrirá la temporada cestista parten con una previsión optimista, aunque nada garantiza que se vayan a ocupar las butacas del pabellón, aunque sea con un aforo limitado.

La última referencia de presencia de aficionados en el recinto lagunero está en el segundo encuentro de las semifinales de la Liga Endesa 20/21 entre el Lenovo y el Barcelona. Ese día, el 9 de junio, animaron a los aurinegros en vivo mil espectadores. En esa fecha, Tenerife registró 92 nuevos contagios y sumó un acumulado de 1.081. Ayer, las cifras fueron de 362 casos activos y un total de 5.332.

A falta de 53 días para que la Supercopa Endesa se ponga en marcha sobre el parqué de la Hamburguesa, la duda está en si se repetirá el escenario de hace un año. La clave para que no sea así podría residir en el incremento de la población que está siendo vacunada. «El ritmo es muy bueno y se está trabajando mucho para conseguir que, por ejemplo, cuando llegue el mes de septiembre tengamos superado el 70 por ciento de la población vacunada y podamos respirar con más tranquilidad», dijo Pedro Martín «convencido de que va a existir la «posibilidad de abrir la cancha y de que haya público».

Por su parte, el presidente de la ACB recordó que «los porcentajes relacionados con el público van a estar medidos por la fase en la que esté la incidencia de la pandemia», y aclaró que «todos los escenarios están contemplados». Antonio Martín prefirió no dar posibles cifras de aforo, ya que «sería una tontería», y aconsejó tener cautela. «En marzo de 2020, en ACB nos marcamos una prioridad sanitaria y seguimos con ella, así que tenemos que ser cautos e igual de responsables, pero también optimistas, porque el nivel de vacunación está siendo alto».

El pasaporte Covid.

Enrique Arriaga no ocultó que la Supercopa en Tenerife vuelve a estar condicionada por una «incógnita que no se puede controlar», pero quiso compartir su presentimiento de que los equipos no estarán solos en el Santiago Martín, a pesar de que los contagios «se han disparatado» por el efecto de las nuevas variantes del virus. «El ritmo de vacunación se va a reflejar en el descenso de contagios y eso va a permitir que tengamos público», indicó dejando para más adelante los cálculos referentes a las entradas que se pondrían a la venta. «Ahí va a cobrar una especial relevancia el pasaporte Covid», añadió el vicepresidente del Cabildo.

¿Por qué en Tenerife?

La sede elegida inicialmente para albergar la Supercopa Endesa de 2021 fue Burgos, pero la ciudad castellana rechazó esa oportunidad a medio camino. En ese momento, Antonio Martín pensó en Tenerife como la mejor alternativa. La experiencia de la edición anterior había resultado más que convincente, a pesar del inconveniente de la ausencia de espectadores. Precisamente, en uno de los partidos de esa competición, Enrique Arriaga le llegó a plantear a Martín la posibilidad de repetir. «Hablé con Antonio en el palco, con el pabellón vacío, y le dije que nos debía una, que aquello no era justo, porque habíamos hecho un gran esfuerzo y nuestra gente no había podido disfrutarlo», contó desvelando el punto y seguido de una relación entre la ACB y el Cabildo que tardó menos de lo previsto en retomarse. «Por casualidades de la vida, la sede de Burgos se cayó y automáticamente la ACB se puso en contacto con nosotros para preguntarnos si queríamos organizar la Supercopa. Y nos pusimos en marcha en un momento en el que veíamos la salida de la pandemia», señaló el encargado de ejercer de enlace entre las dos instituciones.

En realidad, Antonio Martín se había quedado con la pena de no haber vivido una Supercopa con público en el Santiago Martín, y tuvo muy en cuenta la voluntad de Arriaga. «A la ACB le ha pasado lo que le pasa a la gente que viene a Tenerife, que luego vuelve. Eso es lo que tiene esta Isla», apuntó dándole un alto valor a una competición que «significa mucho», no solo por su dimensión deportiva. «Los cuatro equipos van a dar un espectáculo terrible y, además, será el primer evento importante bajo techo y marcará una pauta para el resto de la temporada».

La Supercopa de Tenerife ya está preparada. Solo falta el público.