Lo logrado por el Lenovo significa un hito histórico en el baloncesto canario, ya que nunca antes ningún conjunto de las Islas había alcanzado la tercera posición tras la fase regular. Logro mayúsculo para el cuadro canarista que no solo firma su cuarta presencia en playoff en este último lustro, sino que además lo hace como cabeza de serie y, como añadido, en el tercer escalón del podio.

Pero esta consecución de la escuadra aurinegra no solo supone establecer un nuevo listón particular (al margen de ver si es capaz de mejorar su actual balance de 26 victorias y solo ocho derrotas), sino que su tercera plaza en esta liga regular significa una especie de intromisión dentro de un selecto grupo de clubes elegidos. Algo así como un círculo cerrado en el que apenas han tenido cabida los conjuntos que no poseen el estatus de Euroliga. Los datos, desde que se fundara, allá por el ejercicio 00/01, la máxima competición continental de clubes en sustitución de la Copa de Europa, son abrumadores.

Así, en estas últimas 20 temporadas (y dejando de lado el curso pasado, en el que el Zaragoza iba tercero en el momento de la suspensión pero con 11 jornadas pendientes), contados son los casos de los ‘No Euroliga’ que han logrado hacer Top 3 en la fase regular. Así, de las 60 hipotéticas plazas de podio desde la 00/01, entre Real Madrid, Barça y Baskonia (los tres conjuntos de Licencia A) se reparten nada menos que 46 presencias.

De los 14 huecos restantes en el podio es el Unicaja el que ha salido más respondón. Los cajistas han sido primeros un curso (05/06), segundos en otro, y terceros en tres ocasiones más. Por su parte, y con ese mismo estatus en el año en cuestión, el Valencia fue tercero dos veces y el Joventut una más.

Son precisamente el cuadro taronja y la Penya los únicos que hasta la fecha habían discutido esta supremacía de los clubes de Euroliga. Los hicieron los valencianos en cuatro ocasiones, primero en la 02/03 cuando jugaron ULEB Cup, y ya más recientemente por partida triple (13/14, 15/16 y 16/17), coincidiendo con la pujanza de la entidad de Juan Roig por hacerse un hueco entre los mejores de Europa. Los badaloneses, por su parte, también se mostraron irreverentes en el ejercicio 07/08 aprovechando la explosión de Rudy Fernández y la eclosión de Ricky Rubio.

Ahora el CB Canarias inscribe su nombre en una selecta nómina que parecía reservada en exclusiva a las grandes potencias del basket nacional. Lo hacen, además, los de Txus Vidorreta, con dos datos añadidos que otorgan más valor, si cabe, a su logro. Por un lado, certificar dicho podio con dos partidos pendientes para el término de la fase regular; y por el otro, hacerlo en la liga con más jornadas de la historia más reciente de la ACB (36 encuentros en lugar de los 34 habituales), un calendario que, sobre el papel, favorece a los conjuntos de más poder adquisitivo y que pueden permitirse plantillas más profundas. Tras esta brillante fase regular, los aurinegros pueden refrendar, en playoff, un año para el recuerdo.