Un test con nivel de playoff. Una vez asegurada matemáticamente su condición de cabeza de serie en la ronda de cuartos de final, el Lenovo Tenerife sigue quemando etapas en el calendario con el fin de llegar en las mejores condiciones posibles al tramo más decisivo del curso. Esta tarde, en Badalona, el conjunto lagunero pasa una prueba de nivel, la que le hará el histórico Joventut en un partido cuya exigencia bien podría asemejarse a lo que se van a topar los de Txus Vidorreta en la primera eliminatoria por el título. Debería ser, sobre el papel, y junto con el duelo ante el Barça, el choque más exigente de los que le quedan a los isleños en estas últimas cinco jornadas. Será, de paso, un buen examen para una cita a la que los laguneros ya miran de reojo, la Final Eight de la Basketball Champions League.

Pone a prueba también hoy el Lenovo su capacidad física, ya que el del Olimpic será su noveno encuentro en apenas 25 días. Hasta la fecha los aurinegros parecen haber aguantado el tirón, con ocho triunfos ligueros en sus nueve compromisos ligueros más recientes. Esta vez, sin embargo, entra en juego un hándicap, el de la minutada que tuvieron que meterse el miércoles los dos bases, Huertas y Fitipaldo (casi 60 minutos entre los dos), para paliar la ausencia de Salin por problemas físicos, y la falta de adaptación de Jenkins, todavía algo perdido en los esquemas del técnico canarista. Hoy, con el finés supuestamente ya de vuelta, y el norteamericano algo más integrado, el reparto de tiempo en cancha debe ser más parejo.

Se topa esta tarde el conjunto canarista con un rival un tanto imprevisible. Y es que la Penya, pese a su gran primera vuelta, parece estar acusando las lesiones de varios de sus jugadores, en especial de un Xabi López-Aróstegui, que comenzaba a ser diferencial antes de lastimarse el tobillo. A la del alero se suman las ausencias seguras de Jackson y Zagars, mientras que son duda Birgander y Dawson. Los de Carles Duran solo han ganado un partido de los últimos cinco, y si bien su presencia en playoff no parece peligrar, sí tratarán los verdinegros de apurar unas pequeñas opciones de evitar la séptima plaza y no cruzarse así con el Barça.

Aunque los tres últimos compromisos entre canaristas y badaloneses se han resuelto en favor del cuadro isleño, lo cierto es que el Lenovo hace más de tres años (desde el 15 de octubre de 2017) que no gana en una pista que tradicionalmente le ha sido muy esquiva. Para cambiar la tendencia en el Olimpic, hoy Vidorreta y los suyos deben tener cuidado con jugadores como Morgan –que habitualmente suele hacer daño a los laguneros–, el exaurinegro Ferran Bassas, y también con Ante Tomic, que en el duelo de la primera vuelta (con triunfo tinerfeño por 86-82) se disparó hasta los 35 de valoración gracias a sus 22 puntos y 11 rebotes. Atarlos en corto, y reeditar las notables prestaciones defensivas ofrecidas en los últimos partidos (ha recibido 64 puntos de media en los dos últimos duelos) son los argumentos más contundentes del Canarias para alcanzar la vigesimosexta victoria liguera.