Con sensaciones encontradas se presentó anoche en rueda de prensa Txus Vidorreta. Por un lado, “contento por la victoria, y también por ser primeros en esta segunda ronda como en la de grupos para jugar así la cuarta fase final de la BCL” sobre cinco posibles. Pero también fastidiado “con la desgracia de los problemas físicos de Salin y Yusta, e incluso Sergio Rodríguez”, que se unen a los que arrastran Butterfield y Díez. “Estamos en un momento delicado de la temporada, con muchos partidos y pocos jugadores, con una rotación más corta de lo que me gustaría”, se lamentaba el preparador del Lenovo Tenerife, cuya mayor impotencia es que buena parte de estos percances se han producido “en situaciones no habituales del juego”, caso del “enganchón con el balón que tuvo Sasu en el dedo de la mano”.

Aún así, Vidorreta prefiere quedarse con que en el duelo de anoche pudo “controlar los minutos muy bien”, algo que fue posible “desde una buena defensa y criterio ofensivo pese a los malos porcentajes que hubo en el triple”, para lograr siempre notables diferencias, “de 14 arriba al descanso y luego, con una buena racha de Álex López, mayores”. En ese reparto de presencia sobre la pista, el entrenador canarista admite que le “hubiera gustado hacer una rotación más corta, algo imposible por las lesiones”, pero también se queda con que “ solo dos jugadores han pasado de los 23 minutos, Álex López y Sergio Rodríguez”.

No es ajeno Vidorreta a que el Burgos “ha reservado a Benite, Rabaseda y Rivero”, pero a la vez cree que su equipo llegará al encuentro de la Liga Endesa “en buenas condiciones” al partido de mañana, un duelo “diferente porque el Burgos tendrá a más jugadores”. Aún así, el técnico espera que el desgaste físico también le pase factura a su rival. “Llevan una carga de encuentros importantes, y uno muy exigente el domingo, al margen de que la semana anterior jugaron tres partidos. Ellos han podido dar descanso a varios jugadores, pero nosotros no tuvimos que forzar a nadie. Hemos podido descansar ganando”, añadió.