Otra victoria del Lenovo Tenerife, esta vez sin un esfuerzo extra. El cuadro canarista ha sumado este sábado su victoria liguera número 21 del curso tras doblegar con suma facilidad al Coosur Real Betis (82-93) en un partido que apenas tuvo historia. Y es que entre la dirección de Marcelinho Huertas (13 asistencias) y el acierto desde el perímetro antes del descanso (9/17 en triples) permitieron un parcial de 4-20 (21-42) que dejó prácticamente sentenciado el duelo antes del intermedio (30-51). Por si quedara alguna duda, a la vuelta de vestuarios la aportación de los interiores (26 puntos en los dos últimos cuartos) logró mantener a buen recaudo la renta amasada. También sobresalió Sasu Salin, autor de 20 puntos y cinco rebotes para 24 de valoración. No jugó Butterfield, que ha recaído de su lesión en el psoas, pero sí lo hizo Shermadini, que se fue hasta los 15 tantos.

Se apoyó de entrada el Lenovo en el acierto de Salin (ocho puntos con 2/2 en triples en poco más de tres minutos para el 7-12) y, sobre todo, en la magistral dirección de Huertas, que tanto anotó (seis puntos) como asistió (cuatro) bajo el aro y al perímetro. Pese a alguna pérdida aurinegra y la capacidad local para irse hacia dentro (11-13), la resolución del base brasileño y también la aportación interior de Guerra permitieron al Canarias abrir la primera brecha (13-22).

La segunda falta del propio Guerra y un aumento en la intensidad defensiva del Betis hicieron que los aurinegros colapsaran un instante, a la vez que también vieron como la inexistencia de la segunda ayuda interior se convirtió un filón para los andaluces (17-22, 10'). Fue solo un momento de apuro, porque los laguneros, a la vez que mantuvieron bien cerrado su rebote (solo tres ofensivos de los locales en 20 minutos), también elevaron su aplicación atrás, pero sobre todo destaparon su versión más desequilibrante desde el perímetro, con cinco triples (dos de Sulejmanovic, Fitipaldo, Salin y Yusta) en el arranque del segundo cuarto, los tres últimos en apenas 77 segundos. Casi sin darse cuenta el Lenovo Tenerife rompió el partido ante un rival descolocado (mate de Shermadini y técnica Plaza) y que se vio 21 abajo (21-42, 16').

De poco le sirvió al Betis la aportación de Ouattara (28-44), ya que la dirección de Huertas (ocho asistencias al descanso), una nueva aparición de Salin (cinco puntos para un total de 15 a la media parte) y el noveno triple aurinegro (Doornekamp) volvieron a disparar a los canaristas (30-51). Incluso se permitió Vidorreta jugar sin cinco puro (tirando de Sulejmanovic) para preservar a Shermadini de su tobillo y a Guerra de las faltas.

Salió algo frío en el tercer periodo el Canarias (dos pérdidas seguidas), al que le costó descifrar la presión a toda cancha de un rival que también estuvo acertado desde el perímetro (Feldeine y Kay) para un parcial de 12-4 que le hizo albergar alguna opción de luchar por el partido (42-55). Fue el aviso suficiente para que el Lenovo reordenara ideas de la mano de Huertas. El brasileño dio una master class en la dirección, asistiendo (cuatro pases de canasta más) y marcando los tiempos para anotar para que los isleños volvieran a la veintena de ventaja (44-64, 26').

Sofocado el intento de rebelión local, ya no hubo más partido por mucho que los de Vidorreta aflojaran desde el 6,75 (1/7). Una racha que cortó Rodríguez (49-72), lo que unido a un par de acciones de calidad de Cavanaugh dentro de la zona permitieron a los aurinegros afrontar los diez minutos finales con su mayor renta del duelo (50-74). Con todo resuelto, el último cuarto se limitó a un intercambio de golpes, y aunque los locales (liderados por Campbell) anotaron con mayor facilidad (19 puntos en cinco minutos y luego varios triples) nunca les dio para inquietar lo más mínimo la supremacía en el electrónico (80-91) de los canaristas, que ya suman 21 victorias en 26 encuentros y que este domingo podrían ser, matemáticamente, equipo de playoff.