El balón no se regala porque sí

A menos posesiones, menos margen de error. Así podría entenderse la filosofía baloncestística del Lenovo Tenerife, de los conjuntos de toda la Liga Endesa que más suelen amasar el balón hasta dar con la situación ideal de tiro. Minimización de riesgos en el manejo del balón, un factor con un enorme valor en las prestaciones de los aurinegros, pero que puede perfectamente pasar desapercibido en el conjunto lagunero, cuyos focos se suelen centrar en sus cualidades ofensivas. Y es que tras 25 jornadas el cuadro canarista es el equipo que más anota de toda la ACB con casi 89 puntos por duelo.

El mejor en casi tres años.

Pero más allá de ese caudal ofensivo mostrado habitualmente por los de Txus Vidorreta, el haber reducido su número de pérdidas se convierte en uno de los argumentos por los que se explica el salto cualitativo de los canaristas. Así, el Lenovo Tenerife solo regaló cinco posesiones el pasado fin de semana en su visita al Obradoiro. Para dar en Liga con unas prestaciones mejores del cuadro isleño hay que remontarse hasta el 24 de mayo de 2018, cuando en un partido sin historia los tinerfeños solo perdieron cuatro bolas ante el ya descendido Betis que casi no se presentó a aquel encuentro: 62-109.

Séptima ocasión.

Con lo sucedido en el Fontes Do Sar se confirma así la tendencia de las anteriores jornadas ligueras, ya que el Lenovo Tenerife venía de perder solo nueve balones frente al Baskonia (el que más recupera de la competición) y siete contra al Andorra. Con estos tres encuentros son ya siete las ocasiones en las que los laguneros bajan de los dos dígitos en pérdidas dentro de la Liga Endesa 20/21: siete contra Estudiantes y Bilbao, y nueve en sus duelos ante Valencia y Joventut. Muy lejos queda el peor guarismo del curso, cuando en su estreno (con prórroga), los aurinegros desperdiciaron 20 de sus ataques sin ni siquiera lanzar a canasta.

Menos que el año pasado.

En la actualidad, después de 23 encuentros disputados el Lenovo Tenerife acumula 12,7 pérdidas por encuentro, una cifra que le convierten en el segundo mejor conjunto de la competición, ya que sus guarismos solo los supera el Unicaja (11,7). El citado valor adquiere si cabe mayor relevancia si se compara con el del curso pasado, en el que en números globales de toda la ACB hubo menos pérdidas en el que presente ejercicio. Ahí los canaristas acabaron con 13,4 regalos por compromiso, siendo la octava peor escuadra en esta faceta.

Huertas, el termómetro.

Uno de los grandes responsables de esta mejora en el manejo del balón es Marcelinho Huertas. El brasileño, pese a que su técnico justificó en varias ocasiones los riesgos que tomaba en ataque en relación a todo lo que producía, acabó el pasado curso como el jugador de la Liga Endesa que más balones perdía, nada menos que 3,8 por duelo. El siguiente en la lista fue Askia Booker (UCAM Murcia) con 2,7. Ahora, y sin apenas ver mermada su capacidad en el reparto del juego, el veterano paulista parece algo más atinado y ha bajado sus registros hasta los 2,6 regalos por choque. Seis jugadores en la Liga pierden más que él. Si Marce mantiene ese equilibrio, todo apunta a que el Lenovo Tenerife también mantendrá sus actuales guarismos con el balón en las manos.