Pick and roll, alley oop, flopping... Vocablos anglosajones que son más que habituales desde hace tiempo en la jerga cestista. Sin embargo, recientemente este tipo de terminología de origen estadounidense ha crecido en cantidades ingentes. Tanto, que muchas veces el aficionado de a pie puede perderse en medio de este nuevo idioma.

“El Madrid ha subido líneas sobre nuestros manejadores de balón, y también con Tavares más encima, no tan flat, lo que ha nos ha dificultado encontrar buenas opciones; además han estado muy bien en el close out sobre nuestro tiradores...”. Así se expresaba en rueda de prensa Txus Vidorreta a modo de resumen tras caer en las semifinales de la Copa del Rey. Lo hizo el preparador del Lenovo Tenerife con una terminología que igual se le escapa al aficionado corriente. Pero en ella, sin embargo, no hay nada particular, ya que se trata de la misma jerga que él y todos sus colegas de profesión emplean a diario cuando se dirigen a sus jugadores. Ahora, sin público en las gradas y ante la imposibilidad de entretenimiento en los parones, dichas expresiones son aún más patentes. Una tendencia irremediable que tratan de explicar Marco Justo y Nacho Yáñez, ayudantes del preparador canarista.

El perfil de jugador.

“Lo que conduce a tanta terminología así es el perfil de jugadores que tienes, ya que cada vez hay más extranjeros, mientras que los españoles entienden esos términos en inglés y no surgen problemas”, comenta Justo sobre una situación que refuerza Yáñez. “Es que además el lenguaje tiende a contar con palabras más fáciles y determinadas para todo”, apunta el madrileño. “Ahora decimos bump en lugar de body check, y mucho menos recurrimos a hablar de estar en un sitio determinado para empujar al rival. Con una sola palabra ya sabemos a lo que nos referimos”, argumentan ambos.

Aceptación paulatina.

Código específico necesario por diversos motivos y que se ha convertido casi en un idioma durante los partidos. Eso sí, Yáñez admite que él “antes estaba en contra” y trataba de no estar todo el rato hablando de esta manera”. Ahora, su percepción cambia al entender esta herramienta como “útil en el día a día”. “Son conceptos muy específicos que entendemos todos, incluidos los jugadores españoles. Hacerlo al revés se haría eterno”, explica en este sentido antes verlo todo con perspectiva histórica. “Hace bastantes años un pick and roll sonaba raro pero ahora todos sabemos lo que es”, añade.

Los tiempos muertos.

Mucho más explícito es Justo, que no sabe “por qué existe rechazo a que se utilice esa terminología”. “Supongo que sucede eso por el desconocimiento, porque la gente anda medio perdida viendo un partido y no sabe a lo que se hace referencia”, se cuestiona. “Ahora resulta complicado escuchar en un tiempo muerto a alguien decir que hay que poner un bloqueo indirecto o algo similar. Tienes un minuto y hay que aprovecharlo, por lo que es indispensable hablar inglés. Nosotros tenemos algo más de suerte, pero en la actualidad en cualquier equipo de baloncesto la mayoría de los jugadores no hablan castellano. Así la misma palabra te sirve para todos, es jerga baloncestística”, profundiza en su explicación.

Más de 50 términos.

Ni Justo ni Yáñez saben enumerar con precisión cuántos términos se podrían emplear en este basket moderno. “Puede haber unos 50 muy concretos sobre situaciones en el campo, ayudas, posiciones, movimientos en ataque, zonas de la cancha, gestos, tipos de tiro...”, comentan. En lo que no titubean es en que la actual plantilla canarista “conoce todo el playbook” –término para referirse al manual de las distintas jugadas y conceptos tácticos del equipo– de Vidorreta a la perfección. “Sí es verdad que nosotros tenemos unas normas defensivas que quizá los que llegan nuevos no hayan usado anteriormente, pero desde que lo adquieren no hay que explicar nada más”, puntualizan.

El equipo más ‘rico’.

Y es que este Lenovo Tenerife de los últimos años se viene caracterizando por ser uno de los conjuntos de la ACB con más recursos tácticos de toda la Liga Endesa. “Creo que sí, que somos el equipo que más normas tiene”, comenta Justo. “Es complicado saberlo porque no estamos dentro de los demás equipos, pero por lo que ocurre en los partidos y por lo que dicen los jugadores cuando se marchan a otros sitios y se encuentran con situaciones más reducidas, es así”, asevera Yáñez.

Buscando jugadores listos.

Una amplitud de recursos que lleva aparejada una obligación: buscar en el mercado jugadores inteligentes. “Es el perfil que el club lleva años buscando, algo que para Txus resulta clave”, afirma Marco. Nacho, en este sentido, explica que “no siempre es fácil de saber qué IQ [índice de inteligencia] tiene cada jugador, y lo que te encuentres en pretemporada es lo que determinará lo grande que puedes hacer las normas, o si por el contrario tienes que reducirlas porque el grupo no llega a tanto”. “Si ves que al grupo le entra todo, sigues y sigues”, añade sobre una situación que seguro es habitual en el cuadro canarista.

Sikma, el mejor ejemplo.

En esta línea, ¿qué jugador de los que han estado a sus órdenes ha interpretado mejor este diverso abanico de recursos? La respuesta en “muy fácil” y unánime: “Luke Sikma, es algo que se ve. No solo por lo que él hace, sino por su capacidad para dirigir al resto del equipo en la cancha”. Eso sí, ambos dejan claro que también han pasado o están en el equipo “otros jugadores muy listos, capaces de asimilar todos los conceptos que tenemos y todos aquellos que Txus ha ido metiendo posteriormente”.

Un equipo reconocible.

El Lenovo Tenerife de Txus Vidorreta se ha caractizado en este último lustro por ser un equipo ordenado, que tira de inteligencia y paciencia en un baloncesto a pocas posesiones. Más recientemente quien se lleva los focos es la pareja Huertas-Shermadini (este año con el añadido de Fitipaldo y Guerra) y su producción en el pick and roll. “Es que tenemos muy buenos jugadores tanto en el manejo como finalizando”, argumentan los ayudantes del técnico vasco.

Y con sello propio.

Pero no solo del pick and roll vive el Canarias, ya que algunos de sus recursos habituales tienen sello propio, aunque “siempre es complicado asegurar que algo exacto lo has inventado tú”. “Por ejemplo, el super last es un concepto creado por Txus, al igual que el fire. O incluso el next, que si bien el concepto no se inventó aquí, las normas que se crearon alrededor de cómo se hacía el next sí que eran nuestras, ya que nadie lo hacía de esa manera. Fuimos puliendo normas alrededor de eso, y en función de cómo te ataca el rival tú das más respuestas”, destacan Nacho y Marco. A este repertorio particular añaden otra situación concreta que juegan para el tiro exterior de Salin y que “fuera la han bautizado como ghost screen”. Términos que ejemplifican la adaptación del Canarias al baloncesto moderno. Una razón más por la que se explica el buen rendimiento del cuadro aurinegro.