El gran momento de Shermadini y Guerra pasa mañana un duro examen. Lo hacen con su visita al Andorra, donde Malik Dime está sembrando el terror en las zonas.

Hace apenas un mes el Iberostar Tenerife derrotó con cierta holgura (93-81) al Morabanc Andorra. Ese día los laguneros fueron netamente superiores a su rival en el juego interior, hasta el punto de que entre sus cuatro pívots (Shermadini, Guerra, Cavanaugh y Sulejmanovic) sumaron 38 puntos y 22 rebotes para 57 de valoración. Mañana, sin embargo, la historia podría ser bien distinta, básicamente porque los del Principado recuperan a algunos ausentes en el duelo del Santiago Martín. Uno de ellos es Malik Dime, senegalés de 2,06 metros y que vive su primera experiencia de nivel en el basket europeo. Por ahora, su sello queda marcado por encima de las dos canastas.

Con los cuatro tapones que colocó el pasado domingo en los poco más de 18 minutos que permaneció en pista contra el Real Madrid, Dime llega a este duelo frente al Iberostar Tenerife con una tarjeta de presentación que asusta y también sin parangón en la última década dentro de la Liga Endesa. Así, el senegalés es el jugador que mejor promedio taponeador presenta en relación al tiempo que está en cancha.

El atlético interior africano pone una chapa por cada siete minutos y 40 segundos que juega. Una proporción que no se veía desde que en la temporada 10/11 Bismak Biyombo lo hiciera con una cadencia de un tapón cada 12 segundos menos (7:28”). En lo que va de siglo ningún otro jugador ha alcanzado estos guarismos. Ni en su día el mítico Fran Vázquez ni en los ejercicios más recientes un Edy Tavares que ha sido amo y señor de las zonas.

No es el de la última jornada el tope de Dime en los 12 encuentros que ha podido disputar hasta la fecha en ACB. Y es que en su tercer partido en España el pívot del Andorra ya le puso cinco gorros al Unicaja en apenas 20 minutos sobre la cancha. La constatación de lo que siempre ha sido la mejor virtud de Dime, la de intimidar. Lo hizo en su universidad (2,4 de media en su último año) y en todos sus periplos por ligas menores de varios países europeos: Bosnia (4,1), Finlandia (3,1), Bulgaria (2,5) y Grecia (1,4). Ahora, en una competición de máxima exigencia, su irrupción está siendo espectacular en esta faceta.

Su presencia en pista mañana requerirá del Iberostar un redoble de esfuerzos. Casi en las mismas dimensiones que el realizado frente al Manresa una semana atrás. Y es que Dime no solo pondrá a prueba los tan efectivos ganchos de Shermadini, sino también obligará a los aurinegros a negar las continuaciones del senegalés, y cerrar bien su rebote para atar en corto su impronta atlética, así como saber correr hacia atrás, otra de las virtudes de Malik. Los pívots canaristas ya saben lo que les espera en el Principado.