Tenis

Djokovic llama a la puerta de la historia en Roland Garros

El tenista serbio opta al 23 Grand Slam en la final ante el noruego Casper Ruud | "Estoy en condiciones de hacer más historia en este deporte pero falta un paso", dice el serbio

Novak Djokovic.

Novak Djokovic. / EFE

Jaume Pujol-Galceran

La Phillippe Chatrier está preparada para la gran ocasión. Novak Djokovic pisará este domingo su tierra roja dispuesto a dejar huella en Roland Garros y, sobre todo, en la historia del tenis. En su mano está conquistar el 23º Grand Slam de su carrera. Superar el récord que comparte con Rafa Nadal, con 22, y hacerlo sobre la tierra dominada por el campeón balear, ausente por una lesión en la cadera. Pocos dudan que lo consiga.

“Estoy muy cerca de ese momento. Lo sé. Estoy muy feliz de estar en condiciones de hacer más historia en este deporte pero solo estoy pensando en conseguir otra victoria”, decía tras superar a Carlos Alcaraz, el obstáculo principal, en ese gran reto.

Djokovic afronta el último escollo, antes de convertirse en el mejor jugador de la historia del tenis, al menos por las estadísticas frías de los números, aunque en otras valoraciones, tanto Roger Federer como Nadal, le siguen sacando ventaja y no parece que vaya a superarles nunca.

Casper Ruud, el último que puede impedir el éxito de Djokovic, no parece el rival más duro para impedirlo. El exnúmero uno es el favorito absoluto. Ni en Noruega confían en el milagro. Las estadísticas prepartido dejan también pocas dudas de quién levantará la Copa de Los Mosqueteros por tercera vez. No solo por el palmarés del serbio con 22 Grand Slams y 93 títulos contra los 10 títulos del noruego y tres finales de Grand Slam en su palmarés. Dos en Roland Grros y una en el US Open.

También en los enfrentamientos Djokovic domina por un inapelable 4-0 a Ruud, que no le ha ganado aún ni un set y ha perdido en tierra las dos veces que se han cruzado antes, en Roma. Las apuestas son claras el triunfo de Djokovic se paga a 1,22 euros y el de Ruud a 4,50. 

Ruud ya afrontó una situación parecida el año pasado ante Nadal. La final entonces no tuvo color. Esta vez parece que puede repetirse la situación, aunque la experiencia de aquel partido y la final jugada por Ruud en el Abierto de Estados Unidos ante Alcaraz, le permitía creer un poco más en sus opciones, aunque sean mínimas. “Intentaré jugar liberado, sin presión. Utilizaré la derrota del año pasado como motivación extra. Estar de vuelta es una sensación genial. No creía que llegaría a la final”, decía el noruego, de 24 años y número 4 mundial. 

Las finales del serbio

La final perdida por Djokovic en 2015, cuando eliminó en cuartos a Nadal y cayó ante Stan Wawrinka es el único borrón en un escenario donde el serbio ha jugado siete finales y, además del suizo, solo ha perdido las tres disputadas ante Nadal (2012, 2014 y 2020), En las otras ganó a Murray (2016) y Tsitsipas (2021.

“Estoy listo para luchar por un Grand Slam otra vez. Tengo toda esta historia a mi favor. Es un privilegio poder escribir la historia de este deporte que tanto amo y que tanto me ha dado. Mi motivación es muy alta pero queda un partido para tener en mis manos la copa”.

Alcaraz busca explicaciones

Y mientas Djokovic se prepara para su gran baño de gloria, lejos de París, ya en Murcia, Alcaraz va a pasar una revisión exhaustiva de su cuerpo para buscar los motivos de esos calambres que le atenazaron ante el serbio y convirtieron su sueño de suceder a Nadal en el palmarés en un calvario.

No es el primer contratiempo. Y eso, a sus 20 años, preocupa a su entorno que, en París lo ha llevado entre algodones cuidando su cuerpo, reservándolo sin entrenar los días antes de sus partidos. A finales de noviembre del 2022 se quedó sin jugar su primer Masters y la final de la Copa Davis por una lesión de abdominales que le obligó a retirarse en en cuartos de final de Paris-Bercy ante el danés Holger Rune

Un par de meses después, antes de viajar al Open de Australia, se quedó en Murcia por una lesión en el isquiotibial de su pierna derecha y no pudo competir hasta el torneo de Buenos Aires, en febrero. Después jugó y perdió la final de Rio de Janeiro, cojeando ante Cameron Norrie

Los calambres de París no son nuevos. En las últimas semifinales de Miami, que perdió ante Jannik Sinner, también acusó calambres pero como ante Djokovic también terminó el partido. “Hay que buscar soluciones. Saber que se ha hecho mal”, decía Alcaraz antes de marcharse de Roland Garros. 

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