Las federaciones deportivas acostumbran a ser instituciones sin un término medio: o son un hervidero insoportable o una balsa de aceite en torno a un presidente respaldado de manera casi unánime. La Real Federación Española de Fútbol (RFEF) responde a la segunda tipología desde hace décadas, con la breve excepción del tiempo que transcurrió entre la inhabilitación de Ángel María Villar (julio de 2017) y la llegada de Luis Rubiales al cargo (mayo de 2018).

Sirve de ejemplo la última asamblea ordinaria del organismo, celebrada el pasado mes de diciembre, en las que las cuentas presentadas por Rubiales y su equipo obtuvieron el respaldo unánime de los 85 votantes presentes en Las Rozas, tal y como recoge El Periódico de España. Un cónclave en el que la RFEF presumió de músculo económico, con un presupuesto de 406 millones de euros para 2022 que hace palidecer los 146 del último ejercicio del 'villarismo' (2017).

En la asamblea ordinaria que se celebra este lunes, a partir de las 12.00 horas, en Las Rozas los números volverán a ser elocuentes. La RFEF cerró 2021 con 370 millones de euros ingresados y un superávit superior a los 30 'kilos', según las cuentas aprobadas por la junta directiva y que este mediodía deberán ratificar los asambleístas federativos: el propio Rubiales, los 19 presidentes territoriales y 120 miembros electos de distintos estamentos: entrenadores, árbitros, futbolistas...

Pero no es el dinero, para desgracia de Rubiales, lo que marca esta asamblea ordinaria de la RFEF. O sí, pero no el de las arcas federativas. Los audios privados desvelados en las últimas semanas por El Confidencial han cambiado el panorama por completo, abriendo varios frentes judiciales al presidente y con el Gobierno hablando ya de su inhabilitación por parte del Tribunal de Arbitraje Deportivo (TAD) como una posibilidad.

Cambio de sueldo

La primera consecuencia de la tormenta será que Rubiales someterá a votación un cambio en la estructura de su sueldo. Desde que llegó a la presidencia, el mandatario andaluz ligó su remuneración al volumen de ingresos de la RFEF. Una modalidad habitual en altos cargos que se convirtió en un problema cuando se supo que Arabia Saudí pagaba un dinero variable por acoger la Supercopa en función de qué equipos la disputaran.

Eso provoca que, indirectamente, si el Barça y el Madrid se clasifican, Rubiales cobra más. Una cantidad poco significativa para su sueldo total (en 2021, unos 7.500 euros anuales sobre 634.518,19 euros, alrededor de un 1,2%), pero que provocó una lógica polémica que el dirigente atajará en la asamblea, proponiendo que su sueldo sea fijo a partir de ahora. Según informó El Independiente, la propuesta concreta será consolidar como salario estable, sin variable que valga, esos 635.000 euros brutos anuales que ganó el año pasado.

Pero más allá de los números, lo que más se espera es el discurso que ofrezca Rubiales acerca de las informaciones que se han ido publicando en las últimas semanas. Ofreció una larga rueda de prensa el 20 de abril tras los primeros audios filtrados (relativos, principalmente, a la gestión con Piqué de la Supercopa y al piso pagado por la RFEF), pero posteriormente se conocieron más informaciones acerca de un presunto espionaje a Aganzo y de grabaciones a antiguos miembros del Gobierno de Pedro Sánchez.

Frente judiciales

Rubiales decidió entonces guardar silencio (más allá de comunicados institucionales) y posponer su respuesta hasta la asamblea de este lunes, a la que llega acechado por varios frentes judiciales que ya estudian si pudo cometer algún delito.

El 19 de mayo, la Fiscalía Anticorrupción abrió una investigación contra él y contra Gerard Piqué por corrupción en los negocios y administración desleal, tras una denuncia formulada por el presidente de CENAFE, Miguel Ángel Galán. Posteriormente, Manos Limpias presentó una denuncia ante un juzgado ordinaria, pendiente de ser admitida a trámite o no.

Adicionalmente, un juzgado de Majadahonda ha incoado diligencias previas contra Rubiales, Andreu Camps (secretario general) y dos abogados de cabecera de la RFEF por un presunto delito de amenazas, coacciones y prevaricación contra los equipos de Primera RFEF que han decidido formar una organización de clubes al margen de la federación.

Uno de esos clubes, el Dux Internacional, también ha presentado una denuncia contra Rubiales en el Consejo Superior de Deportes, que se suma a la de la Asociación de Futbolistas Españoles (AFE). El CSD estudia ahora dichas denuncias para valorar si las eleva al TAD, que en última instancia podría llegar a inhabilitar al presidente de la RFEF.

Sin Franco

En medio de esta tormenta, el presidente del CSD, José Manuel Franco, no tiene previsto acudir a la asamblea de este lunes en calidad de invitado, algo que sí ha hecho en otras ocasiones. En esta ocasión, no lo hará, según detallan fuentes del Gobierno, en una asamblea en la que también se votará el calendario de la próxima temporada, con especial atención al de Primera y Segunda División, muy condicionado por el Mundial de Qatar.

Tampoco habrá prensa en Las Rozas, si bien cualquiera podrá seguir la rueda de prensa en un 'streaming' en directo. Las asambleas siempre son a puerta cerrada, pero habitualmente se habilitaba un espacio de trabajo anexo para los periodistas. Esta vez no será así, según la propia RFEF, por la coincidencia del cónclave con la llegada de los internacionales masculinos absolutos y sub'21 para sus respectivas concentraciones.