La Real Sociedad fue el último rival del Barça en el último partido en el Camp Nou hace año y medio. Mucho ha cambiado el club desde entonces. Ronald Koeman ocupa ahora el banquillo de un Quique Setién que aseguraba esta semana que tras su breve paso por Barcelona se le han quitado las ganas de entrenar para siempre. El último partido del cántabro fue el humillante 2-8 contra el Bayern, del que este sábado se cumple un año. Tampoco el presidente es el mismo. Tras el revolcón bávaro, Josep Maria Bartomeu dijo que no había un crisis institucional, solo deportiva. Una frase que, tras 97 millones de pérdidas en ese curso y 487 en el siguiente, se podría decir que ha envejecido mal. Tras el récord de firmas de una moción de censura, dimitió y, tras la junta provisional más larga de la historia, Joan Laporta regresó la palco prometiendo que con él Messi renovaría. Pero igual que Setién y Bartomeu, la estrella, el capitán y el autor del único gol ante la Real hace un año y medio tampoco estará este domingo en el campo.

"No hay que vivir del pasado", ha sentenciado Koeman sobre la marcha de Leo. "Creo que en general es doloroso para todos los culés. Entiendo lo que ha hecho Messi por este club y el tipo de jugador que es. Le echamos de menos por ser un jugador tan importante para la historia del Barça. Es doloroso para todos los culés pero son cosas que pasan y hay que mirar al futuro, que es de los jóvenes". El técnico azulgrana ha destacado el gesto de Piqué de bajarse el sueldo para permitir la inscripción de Memphis. "Hay que destacar la actitud de Piqué, Busquets, Sergi Roberto. Llevan muchos, quieren ayudar al club. Es importante y demuestra que son gente de casa", ha sentenciado.

Su compatriota Depay está llamado a ser el faro en ausencia de Messi. "Espero mucho de Memphis. Estuvimos dos años con al selección donde él ha sido un jugador fantástico que dio efectividad y rendimiento al equipo y le pido lo mismo. Es rápido y tiene efectividad. Hemos perdido efectividad con la marcha de Leo y se lo pedimos a todos los jugadores, no solo a los delanteros, también a los medios. Memphis es importantísimo". Otro de los jugadores que debe dar un paso adelante es Griezmann, que ha pasado de estar con un pie de vuelta en el Atlético a pasar a tener un rol clave en el nuevo ecosistema. "Seguramente será más importante. La posición de Leo, donde es una posibilidad que juegue Antoine, da más libertad al equipo y a sí mismo y puede ser una ventaja para él".

El tercer vértice del triángulo ofensivo

El tercer vértice del triángulo ofensivo sería para Ansu Fati, una vez deje atrás los problemas físicos. Tras ocho meses de baja, su regreso parece cada vez más cercano. "Ansu Fati podrá estar en dos o tres semanas entrenando con el grupo y podría jugar después del parón de selecciones". De todas formas, si la economía lo permite, le gustaría poder contar con un delantero más. A la espera de que eso suceda, el Barça ha inscrito este sábado a Rey Manaj, punta del filial, además de a Èric García y Memphis.

De cara al domingo la enfermería se ha vaciado un poco, ya que el entrenador ha anunciado que Gavi y De Jong estarán listos para el estreno liguero. "Estoy muy ilusionado de empezar y de poder tener 20 o 22 mil aficionados (...) El inicio de Liga es importante", ha sentenciado Koeman, que sabe que el inicio puede marcar el tono de una temporada en la que prioriza. "Siempre hay que pensar más en la propia Liga y en este sentido somos un equipo fuerte y podemos aspirar al máximo. La Champions es otra cosa".