Poco premio para la UD Granadilla

Si había alguna duda del nivel que iba a ofrecer la UD Granadilla después de su obligada pausa, por espacio de tres jornadas de la Liga Iberdrola, a causa de la detección de dos casos de coronavirus en su plantilla, ayer quedó demostrado que el de Francis Díaz sigue siendo el mismo equipo competitivo que se había instalado en la parte alta de la clasificación, zona en la que también se mueve su rival de ayer, un Atlético de Madrid al que nunca ha derrotado y que se marchó de La Palmera dando por bueno un punto logrado en el penúltimo minuto.

Las blanquiazules merecieron más en la cita con el supercampeón de España. La igualada tiene mucho valor por el potencial, la trayectoria y el presupuesto del rival, entre otros elementos diferenciales, pero en realidad supo a poco, dado que las tinerfeñas fueron madurando con esfuerzo y concentración un triunfo que se le esfumó cerca del final en una acción desafortunada que aprovechó Deyna para batir a Aline.

Antes de llegar a ese momento definitivo, casi sin tiempo para la reacción, la UD Granadilla mostró sus intenciones muy pronto. En un inicio arrollador, en el que el equipo local aplicó una presión alta y pisó el área contraria con las atacantes María José Pérez, Matín-Prieto y Ange Koko muy dinámicas e incisivas, llegó el 1-0. Había avisado Cristina en el primer minuto, pero la superioridad blanquiazul no tardó en recibir el premio del gol. Lo logró la exrojiblanca Pisco –marcó el tanto del empate en la visita al Atlético de la primera vuelta– al ejecutar de manera magistral una falta directa. El balón tocó en un palo y se coló sin que Lindahl reaccionara.

El Atlético parecía incómodo, no solo por el gol, también por el empuje de las tinerfeñas. Las madrileñas dominaban, pero no encontraban espacios frente a un rival ordenado y eficaz en las ayudas, y también atento al error para robar y salir al contragolpe. Así, Martín-Prieto rozó el 2-0 (24’).

Los planes iban saliendo, pero en una jugada sin señales de peligro, el Granadilla encajó el empate. De una falta en ataque, las de Francis Díaz pasaron a quedar desprotegidas al perder un balón que el Atlético condujo con velocidad para que Ajara anotara (27). Quedó la duda de si Ludmila había dado el pase en fuera de juego.

Antes del descanso, María José contó con un par de ocasiones que no logró definir, mientras que el Atlético, en otro contragolpe aislado, su mejor arma, estrelló el balón en el palo. A Ajara le faltó un poco de puntería para anotar.

Tras el intermedio, el Granadilla volvió a salir al campo con decisión. Martín-Prieto y Raissa avisaron en los primeros minutos, mientras que Deyna puso a prueba a Aline con un tiro lejano atajado por la guardameta brasileña.

El duelo fue perdiendo intensidad y la pugna por dominar el centro del campo pasó a ser el denominador común. El menor error iba a decantar un encuentro que volvió a ponerse del lado de las locales tras un inocente penalti cometido sobre Natalia. Pisco asumió la responsabilidad y marcó.

La UD Granadilla tenía por delante solo 20 minutos para alcanzar el objetivo. En cierto modo, logró que no pasaran grandes cosas y fue enfriando el encuentro ante un Atlético volcado en su intento de sumar. Pero esa insistencia acabó con un último gol (2-2) anotado por Deyna en una jugada con un par de rebotes en el área.