No ha habido sorpresas y las elecciones del Barça el mismo día en que se aplazaban las catalanas. El guion fijaba que la suerte de unas estaba ligada a las de las otras. Y, por más que hubiera quien se resistiera a postergar la cita con las urnas, al final los nubarrones que ya se cernían desde principios de la semana han terminado obligando a suspender ambas consultas, alargando la interinidad de Pere Aragonès y Carles Tusquets en el cargo. Mientras que los comicios al Parlament se postergan al 30 de mayo, si el covid lo permite los culés votarán el 7 de marzo.El célebre 'as soon as possible' de Tusquets llegaría dos semanas antes de los comicios que había convocado Josep Maria Bartomeu para el 20 y 21 de marzo, antes de su dimisión forzada por moción de censura.

El Barça asumía ya de buena mañana que el aplazamiento de las elecciones era inevitable y trabaja en alternativas para poder poner urnas lo antes posible. En la reunión entre representantes del club, el Procicat y la Secretaria General de l'Esport no se ha autorizado ningún salvoconducto especial para los socios, con lo que solo podrían participar los que vivan en uno de los cinco puntos habilitados por el club en Cataluña. El confinamiento municipal impediría, por ejemplo, que los vecinos de L'Hospitalet pudieran cruzar la calle Riera Blanca para ir al Camp Nou. En la cita con el Govern sí que se ha planteado la modificación de la Llei de l'Esport para que se pueda activar el voto por correo, que no está recogido en los estatutos azulgranas. Una opción que ya planteó Tusquets en noviembre cuando convocó las elecciones pero que no había activado en todo este tiempo, pese a que los indicadores ya amenazaban la tormenta que se ha desatado, empantanando un poco más la delicada situación del club.

"El club ha constatado la imposibilidad de realizar las elecciones en la fecha prevista debido a las restricciones de movilidad decretadas por el Gobierno en el actual contexto de pandemia, por lo que la fecha de las elecciones se deberá retrasar", han explicado la Generalitat y Barça en un comunicado conjunto. Tusquets, acompañado del CEO del club (Oscar Grau) y del Síndic del club (Joan Manuel Trayter), ha propuesto la modificación de la legislación deportiva para que se pueda votar en una nueva fecha, opción que los representantes gubernamentales se han comprometido a estudiar. La Generalitat ha descartado hacer excepciones en el confinamiento municipal "dada la elevada movilidad que esto supondría".

La gestora fijó cinco puntos de votación en Cataluña (Camp Nou-Barcelona, Girona, Tarragona, Tortosa y Lleida) y cinco más en Madrid, Valencia, Sevilla, Palma de Mallorca y Andorra. Sin excepciones para poder romper el confinamiento municipal, la mitad de los 110.000 socios se quedarían sin votar a no ser que la entidad habilitara más urnas en el resto del territorio catalán. De los 95.298 que tenían que votar en la sede de Barcelona, solo la mitad (46.740) están empadronados en la capital catalana. Un punto que la gestora se ha comprometido con los aspirantes a la presidencia a trabajar.

Después del encuentro por la mañana con la Generalitat, Tusquets se ha reunido durante dos horas con los tres candidatos para decidir definitivamente qué hacer, ya que el Barça, como entidad privada, tiene potestad para tomar su propia decisión. "Las elecciones no serán el 24 de enero y se intentará que sean el 7 de marzo. Es lamentable que el que sale más perjudicado es el Barça que todos estamos de acuerdo que no puede esperar más a tener un presidente", ha valorado Joan Laporta, el más reacio a postergar la cita con las urnas, pero que ha reconocido que ante la postura del Govern la gestora tenía poco margen. "No es el virus, es la mafia #DictaduraFCB", había tuiteado antes Josep-Ignasi Macià, miembro de la candidatura laportista. Víctor Font y Toni Freixa se habían mostrado partidarios de posponerlas si no se garantizaba el derecho de participación y la seguridad sanitaria de los socios. "La situación de la pandemia se prevé que esté mejor a finales de febrero y se necesita tiempo para implementar el voto por correo. Estamos apuntando a principios de marzo", ha explicado Font tras las cita, que ha señalado que las prioridades son ampliar el número de puntos de votación y activar el voto por correo. El club oficializará el 7 de marzo como la nueva cita una vez la Generalitat le confirme que se podrá haber pasado el trámite parlamentario para la reforma de la legislación deportiva. Solo concurrirán los tres que pasaron el corte, de acuerdo con el informe jurídico que la gestora ha aportado a los aspirantes en el que se señala que el aplazamiento congela el proceso electoral (por lo que no tendría que volver a iniciarse la recogida de los avales).

La interinidad del Barça, sin presidente desde la dimisión en octubre de Bartomeu y con una gestora cuyo mandato terminaba el 28 de enero, se mantendrá como mínimo hasta el 7 marzo, dejando al club en fuera de juego, con carpetas urgentes como los problemas de liquidez y el mercado de invierno. "Si hay decisiones transcendentes se tomarán con nuestra opinión y con el máximo consenso”, ha señalado Font. En este sentido, ante la falta de consenso en el fichaje de Eric Garcia la llegada del canterano se podría posponer hasta verano, cuando queda libre.