El CB Ciudad de La Laguna Tenerife viaja hoy para disputar el partido con el que debuta en competición europea, mañana (19:30), ante el Kangoeroes Basket Mechelen en el Winteektai, en la localidad belga de Malinas. El cruce es a partido único y el equipo ganador quedará clasificado para una segunda fase de la que se han sorteado ya los grupos.

Ayer, la base portuguesa del equipo morado Maria Bettencourt expresó que la plantilla lagunera está “muy ilusionada” y tiene “muchas ganas de jugar este partido, es la primera vez que el club puede jugar esta competición y para nosotros es importante ganarlo”. Esta visita al equipo belga, supone que el conjunto tinerfeño traspasará fronteras nacionales por primera vez en su historia y que luchará por devolver a un equipo de las Islas Canarias a la segunda competición europea.

Debido a la decisión de la FIBA de organizar estas eliminatorias a partido único, el reto gana “más presión, no tenemos un segundo partido, pero es lo que hay, debemos ir a ganar”, pero Bettencourt ha insistido en que la preparación del choque ha estado destinado a ello. Las restricciones covid-19 en Bélgica han provocado que el Kangoeroes Basket Mechelen no haya podido empezar la competición ni realizar entrenamientos de forma continuada y esto es algo que puede ir tanto a favor como en contra del conjunto lagunero.

Bettencourt, que se estrenará en Europa, ha insistido que aunque no habrá tanto trabajo previo sobre el rival como en Liga Femenina Endesa, hay que centrarse en aquellos aspectos que sí se pueden controlar como la concentración, la intensidad o una buena defensa. “Somos un equipo que lleva muchos partidos, somos una familia, hemos pasado un mes complicado después del parón de noviembre porque no hemos vuelto a ser nosotras y porque las lesiones es lo que más daño hace a un equipo, pero estamos trabajando para levantarnos. Las echamos mucho de menos (a las lesionadas), pero tenemos que hacer esto por ellas y por nosotras. Hay que estar ilusionadas, porque estamos recuperando sensaciones y la temporada es muy larga, todavía queda la mitad. No hay razones para estar tristes”, ha insistido.

Tras la cita internacional, llegará el derbi ante el Spar. “El partido con ellas aquí nos costó, allí son muy fuertes, están haciendo una temporada muy bonita y nos va a costar, pero tenemos ganas de ir a jugar allí”, dijo Maria.

“Es mi segundo año, estoy más cómoda”

Maria no conoce en profundidad al rival de mañana. “Sabemos muy poco todavía porque la Liga belga no ha empezado. Es complicado ver un equipo que viene de no competir. No sabemos lo que nos vamos a encontrar. De lo que he visto es un equipo bastante físico, que le gusta correr mucho, pero nosotros estamos preparados, es un juego que nos gusta, no parar, porque somos también un equipo físico. Ahora mismo sé como estamos nosotros, pero saber más de ellas es complicado”. La portugesa admite que eso es una ventaja. “Tenemos la suerte de que en España se puede entrenar y competir, llegamos de otra manera que ellas, pero si yo estuviera en su situación daría la vida”, dijo la base, afianzada en el equipo. “Estoy tranquila, me siento más cómoda, es el segundo año y sé lo que puedo encontrar para hacerlo mejor, conozco mejor a mis compañeras y estoy contenta”, asegura.