El Tenerife tiene la solución en sus manos. Todo se empezaría a arreglar con un triunfo. No hay otra. Eso sí, sin pasar de hoy. El estadio Fernando Torres debe ser, por obligación, el punto de partida hacia una racha, cada vez más necesaria, que saque al equipo del bloqueo en el que se encuentra, de puntos y de también de indemnidad, y que lo va metiendo peligrosamente en el grupo de sufridores de la categoría, sufridores para no bajar. Dadas las circunstancias, el fin justificará los medios. Se supone que de una crisis no se sale brillando en el césped.

¿Y si no ocurre? Los blanquiazules no ganan desde 10 de octubre, al Rayo en el Heliodoro Rodríguez López. A partir de ahí, cuatro jornadas con tres empates -incluyendo el inexplicable 1-1 con el Lugo- y la derrota en la última salida, al campo de la Ponferradina. El insuficiente balance de puntos -de momento, uno por jornada-, unido a la poco convincente respuesta del equipo, ponen a Fran Fernández en una situación delicada. Sin que exista un ultimátum oficial, sí parece que una derrota en Fuenlabrada, con una imagen como la del pasado jueves, podría ser definitiva para el entrenador.

Su fórmula para intentar evitarlo vuelve a ser toda una incógnita, seguramente porque el Tenerife tampoco ha encontrado una alineación tipo. No obstante, el bloque defensivo podría ser el mismo de la segunda parte del partido con el Lugo, con Alberto por un Wilson que no termina de afianzarse, más Kakabadze. Por delante volverá Aitor Sanz -salvo sorpresa-, tras una jornada de descanso. Y a su lado, Ramón Folch, cuyo oficio resulta conveniente ahora. Con esta pareja de mediocentros habría que buscarle un puesto a Zarfino, quizás como volante ofensivo, aunque Fran Fernández ha reconocido que solo lo utilizaría ahí en determinados encuentros; en principio, fuera de casa. Finalmente, en trío ofensivo hay un lugar fijo para Fran Sol, que se estrenó como goleador hace tres días, mientras que en los extremos se supone que Shaq solo dejaría de participar por cansancio acumulado -suma 800 minutos de 810-, y Nono ya le va cogiendo el pulso a la competición. En cualquier caso, para el frente de ataque hay muchas alternativas, como el emergente Shashoua, Vada, Suso, Jacobo, Apeh o Álex Bermejo, que siendo el máximo goleador (2) no tuvo minutos ante el Lugo.

El Fuenlabrada llega a la cita inmerso en una dinámica negativa. A partir de la quinta jornada pasó de tres empates seguidos a dos derrotas. Y en su campo no gana desde la tercera fecha. Sandoval recupera al defensa Juanma, ya repuesto de una lesión, y al centrocampista Pathé Ciss, pero no podrá contar con el central Sotillos.