El estreno de la UD Las Palmas en el Gran Canaria dio para mucho. El equipo amarillo acabó empatando con el Fuenlabrada sobre el tiempo después de malograr una ventaja de dos goles, pero los altibajos del partido quedaron en segundo plano cuando Pepe Mel se desató en la sala de Prensa. El entrenador madrileño, que se quejó de la aplicación del VAR, hizo una alusión elogiosa al césped del Heliodoro Rodríguez, donde su equipo jugó un amistoso hace solo poco más de dos semanas. "Nos estamos tirando piedras contra nuestro propio tejado, dándonos un tiro en el pie. Y no me vale que estemos en Canarias y no en la Península, porque en la isla de al lado (Tenerife) tienen un jardín. El césped aquí, y también el de Barranco Seco (Ciudad Deportiva), es un puto desastre", fue su contundente mensaje.

La queja de Mel, que deja en muy buen lugar el trabajo de mantenimiento de la instalación tinerfeñista, tiene respuesta hoy en La Provincia por parte de Santiago Sosa, responsable de la empresa que se encarga del mantenimiento del estadio de Gran Canaria.

"El sábado 12 sufrimos un ataque de un complejo de hongos. Resultó devastador, dinamitó todo el trabajo de plantación y cultivo (que habían hecho cuando acabó la pasada temporada). Una vez terminado el encuentro (del domingo) ya hemos comenzado con las tareas de aplicación de un nuevo tratamiento", dijo el empleado para explicar por qué el césped del Gran Canaria presenta tan mal estado.