El paso de las horas juega en contra de la afición. A poco más de un día para que se celebre la Supercopa Endesa de Tenerife, ni la ACB como organizadora ni el Cabildo Insular y el CB Canarias como anfitriones han recibido una respuesta por parte de la consejería de Sanidad del Gobierno de Canarias sobre la posibilidad de que haya público en las gradas del Santiago Martín. Pese a que a nivel regional sí se permite la afluencia de espectadores e incluso el nuevo protocolo -aún no ha entrado en vigor- para el deporte no profesional estatal establece un máximo de 500 aficionados para recintos cerrados, todo apunta a que la cita a celebrar en el recinto de Los Majuelos se desarrollará con las mismas características que ya se llevó a cabo la Fase Final liguera de Valencia, con unas gradas de La Fonteta totalmente vacías.

Anoche, Ricardo de Diego, director de marca de la ACB, parecía resignarse a jugar a puerta cerrada los tres partidos del torneo. "Seguimos sin saber nada y lo lógico, a estas alturas, es que no haya público en el pabellón", comentaba en un acto previo al torneo, si bien quiso dejar abierta una pequeña rendija ante "el mundo cambiante y de incertidumbre en el que se vive hoy en día". Era precisamente ayer la fecha que el CB Canarias se había marcado como límite para poder poner en funcionamiento toda la maquinaria que le permitiera despachar de forma espaciada entre los aficionados locales unos 700 abonos, la cifra que ha manejado desde un inicio el Cabildo Insular como aforo razonable y seguro en el Santiago Martín para esta Supercopa Endesa.