El Deportivo-Fuenlabrada, reprogramado para hoy (19:00, #Vamos), dieciocho días después de haber sido suspendido, regresa al césped para poner fin a la fase regular de LaLiga SmartBank, aunque sigue pendiente de las resoluciones que se adopten en los expedientes abiertos por LaLiga y, sobre todo, por la Real Federación Española de Fútbol.

El Deportivo, en principio, no se juega nada, ya que matemáticamente está descendido, y solo está pendiente de lo que se decida en los despachos para intentar quedarse en el fútbol profesional, mientras que el Fuenlabrada aspira a sumar el punto que le aseguraría, a expensas de lo que pase después, el acceso al playoff, en detrimento del Elche.

No obstante, ganar le permitiría al cuadro gallego adelantar al Numancia en la clasificación y, en caso de que se acabe produciendo un descenso administrativo del Fuenlabrada, tener más opciones de ocupar esa plaza. Con todo, en otras instancias, el Dépor ha pedido la repetición de la jornada o que se le dé a los madrileños el partido por perdido y sea, además, descendido.

El técnico local, Fernando Vázquez, convocó a 21 jugadores, 15 de la primera plantilla, para jugar con el Fuenlabrada. Entre ellos, el capitán, Álex Bergantiños, que el miércoles tuvo que prestar declaración ante la Policía Nacional al ser investigado por si hubiera cometido un delito de corrupción entre particulares en el ámbito del deporte al pedir a sus compañeros, a través de un audio, que se presentaran al partido y referirse a este como un "paripé". Las respuestas, esta tarde en Riazor.