Incluyendo traspasos de menor importe, como el que llevó a Javier Moyano al Real Valladolid por unos 50.000 euros en 2015, y llegando a otros mucho más caros, principalmente el que se cerró hace un par de días con el pago de los 5 millones de la cláusula de rescisión del contrato de Luis Milla para que se resolviera su incorporación al Granada, el CD Tenerife de Miguel Concepción -de febrero 2006 en adelante- ha ido acumulando operaciones de venta de jugadores que, en total, le han aportado una suma superior a los 17 millones.

Por orden cronológico en estos últimos 14 años, el primer gran traspaso que firmó el Tenerife fue el de uno de sus canteranos más valiosos, Ayoze Pérez. Su progresión fue tan alta en la Liga 2013/14 que atrajo el interés de un club de la Premier League, el Newcastle. Su salida dejó 2 millones de euros de beneficio en junio de 2014.

Un año más tarde, la desvinculación de Javi Moyano, a las puertas de la temporada 2015/16, resultó más relevante en lo deportivo que en lo económico, dado que el Valladolid solo abonó unos 50.000 euros para hacerse con los servicios del lateral derecho andaluz.

En el verano siguiente, y también en un punto similar del calendario, subió el listón con la apuesta del Éibar por otro canterano prometedor, el delantero Nano Mesa. 3,2 millones de euros convencieron a un Tenerife que se quedaba sin uno de sus goleadores ya con la competición 2016/2017 iniciada.

2017 fue un año de ventas. La más destacada fue la del atacante tinerfeño Cristo González. En su caso, el Real Madrid no quiso dejar escapar la oportunidad de meter en su Fábrica el talento de un joven delantero que estaba dando que hablar en Segunda División por su calidad. Su pase se selló con 750.000 euros. A esa cifra, el Tenerife añadió 100.000 más con una operación inesperada. Germán Sánchez, un central que había sumado a su plantilla dos temporadas antes sin expectativas de negocio, recibió una oferta, la de un Granada en el que el futbolista gaditano encajó a la perfección y con el que subió a Primera División al final de la Liga 2018/19.

Tampoco estaba previsto que en 2018 se extinguiera antes de lo previsto la relación laboral del club tinerfeño con Juan Villar, uno de los fichajes estrella del verano de 2017. Pero el onubense no terminó de cuajar en el representativo y el Osasuna apareció con 850.000 euros para solucionar las cosas.

Eran tiempos en los que estaba fraguándose el traspaso de otro canterano; en esta ocasión, el de un joven central ya consolidado en Segunda. La marcha de Jorge Sáenz de Miera del Tenerife en 2019 era un secreto a voces. Solo faltaba saber qué club de Primera se iba a decantar por su fichaje. Y fue el Valencia, con 2 millones de euros y antes de cederlo al Celta de Vigo. Unos meses antes, en el mercado de invierno, la entidad tinerfeña se había garantizado percibir casi 3 millones por el pase del hondureño Bryan Acosta al Dallas.

Ya en el presente verano, la colección de operaciones se amplió con el paso dado por el Cádiz de hacer efectiva la cláusula de compra sobre Filip Malbasic, al que había incorporado cedido en enero. De ahí, unos 650.000 euros más. Fue el anticipo del traspaso de mayor importe en este periodo, el de Luis Milla al Granada. Los 5 millones invertidos por el club andaluz para liberar al centrocampista por medio de su cláusula de rescisión, representan el récord en la etapa liderada por Miguel Concepción.