Maneras de llegar a los 54

Reencuentro amargo. La década dorada del Tenerife en Primera División, la de los 90, dio paso a un regreso a Segunda División (1999/00) en el que el equipo blanquiazul se propuso regresar a la máxima categoría nacional cuanto antes. Pero tardó dos años en lograr ese objetivo: lo alcanzó con Rafael Benítez en la Liga siguiente. Las prisas en el reencuentro provocaron dos cambios de entrenador: empezó Mauro Sandreani, siguió Castro Santos y acabó Ángel Cappa, con un partido para Felipe Miñambres en el tránsito hacia el fichaje del segundo técnico. Eran tiempos en los que subían a Primera de manera directa los tres primeros clasificados y no había promoción. Justo antes de la antepenúltima jornada -como ahora-, el equipo preparado por Cappa se situó décimo, con 54 puntos y con mínimas opciones de llegar al tercer puesto. Un triste empate sin goles en el Heliodoro con el Leganés (39ª) tuvo continuidad con una visita a El Sadar en la que el Tenerife cayó goleado (5-0), facilitando así la vuelta a Primera del conjunto navarro. El Tenerife no ganó ningún partido con Ángel Cappa y acabó la temporada decimocuarto con 55 puntos.

Krauss, Casuco y Toño. En la primera temporada completa con Miguel Concepción en el cargo de presidente del club, la 2006/07, al Tenerife le costó afianzarse dentro del grupo de aspirantes al ascenso. Bernd Krauss, guía en la apurada permanencia de la Liga anterior, dirigió el equipo en las dieciséis primeras jornadas. Tras ser destituido, fue relevado por Juan Casuco, que dimitió a falta de dos jornadas propiciando el debut en el banquillo de un hombre de la casa, Toño Hernández. El penúltimo partido de Casuco -jornada 39- sirvió para que el Tenerife sumara 54 puntos gracias a un triunfo por 2-3 en el campo del Castilla. En una Liga en la que ascendieron los tres primeros clasificados (Real Valladolid, Almería y Murcia), el representativo ya había quedado descartado para competir por ese objetivo. Una derrota con el Vecindario (0-2) en la despedida de Casuco y dos triunfos con Toño dejaron al Tenerife séptimo al final con 60 puntos.

E La mala racha de Cervera. La siguiente suma de 54 puntos en la jornada número 39 se produjo en la campaña del regreso del Tenerife a la Segunda División A (2013/2014), tras su paso por la categoría inferior. El equipo comandado por Álvaro Cervera se convirtió en una de las revelaciones de la Liga y, ya con la alternativa del playoff instaurada como segundo camino para poder subir a Primera, llegó a ser cuarto clasificado, por detrás del Barcelona B, en la trigésima sexta jornada y con 54 puntos en la clasificación. Pero justo a partir de ahí inició una inesperada y misteriosa racha de siete jornadas sin sumar. Un total de siete partidos seguidos y ni siquiera un empate. En ese camino, el Tenerife se presentó en la antepenúltima fecha con los mismos 54 puntos y, como ahora, situado a dos de los puestos de promoción. Pero no fue capaz de reaccionar.

La llegada de Martí. La temporada 2015/2016 se parece a la actual. Al Tenerife no le fueron bien las cosas con el entrenador que inició ese curso, Raúl Agné, y acertó con el sustituto, un José Luis Martí que consiguió alejar al Tenerife de la zona de descenso para meterlo de lleno en la pugna por jugar la promoción durante la segunda vuelta del ejercicio. Como en la presente campaña, la puntuación en la jornada número 39 fue de 54 puntos, pero la distancia con el sexto puesto resultó ser mucho mayor, de 5 unidades (ahora es de 2). Apenas sin opciones de llegar más lejos en las tres jornadas finales, los blanquiazules se tuvieron que conformar con añadir solo un empate a su estadística y marcharse de vacaciones en el decimotercer puesto, con 55 puntos.

La escalada de Joseba. El Tenerife retomó en el verano de 2017 el reto de ganarse su espacio en Primera División tras la dolorosa derrota en la final del playoff con el Getafe. Siguió en el banquillo José Luis Martí, pero fue destituido en las primeras jornadas de la segunda vuelta, con el equipo atascado en la mitad de la tabla sumando 30 puntos. El director deportivo de esa etapa, Alfonso Serrano, arriesgó con Joseba Etxeberría. El exjugador del Athletic generó el efecto deseado de entrada y activó la remontada pretendida, aunque sin el resultado imaginado. A falta de tres jornadas para el final, el Tenerife tenía 54 puntos y estaba a 7 del sexto, el Numancia. Apurando las opciones matemáticas, el equipo venció luego al Sporting y empató con el Cádiz y el Albacete. En definitiva, 59 puntos en el cierre para ser undécimo.

El reto de BarajaComo en los cinco antecedentes citados, el Tenerife de Rubén Baraja pasará de la jornada número 39 a la 40 con 54 puntos. A diferencia de las anteriores ocasiones, la aspiración de ascender no es tan remota por números y también por sensaciones. De hecho, con un pleno de triunfos, el equipo insular llegaría al final con registros de promoción. "Tendremos que ganarlo todo o casi todo y aún así habría que esperar", dijo Baraja tras el empate con el Zaragoza del pasado jueves refiriéndose a la alta competencia que hay para conquistar el sexto puesto de la tabla.

63 puntos como techo. En el mejor de los casos, el Tenerife 2019/2020 completará el calendario de Liga con 63 puntos. Sería la cuarta mejor puntuación del club en Segunda División a partir de la temporada 99/00. Los tres registros que superan esos 63 coincidieron con años de ascenso o de promoción: los 74 de 2001 con Rafa Benítez, los 81 con José Luis Oltra en 2009 y los 66 con Martí en el playoff de 2017.