Tras el empate de ayer en el Heliodoro Rodríguez López, Rubén Baraja destacó la capacidad de sus jugadores para transformar en muy poco tiempo el objetivo del Tenerife de evitar el descenso para llegar a situarlo en la búsqueda de un puesto en la zona de promoción, cuando solo faltan tres jornadas para el cierre de la temporada. "Hay que aplaudir a estos chicos porque lo que están haciendo es brutal", comentó sin dejar de admitir que será necesario "ganarlo todo o casi todo" para completar el calendario con opciones de luchar por subir.

Después de haber sumado ante "transatlánticos como Cádiz, Almería, Deportivo o Zaragoza", Baraja afirmó que "lo único que se puede hacer es aplaudir al equipo". En ese aspecto, fue comprensivo con las voces más críticas. "Si queremos hacer valoraciones de otro tipo, las puedo entender", añadió el técnico. "Hace 10 o 15 días estábamos hablando de salvarnos del descenso, y en tres partidos hemos sido capaces de mirar a otra cosa. Quizás nos olvidamos de lo otro muy rápido y no valoramos lo que están haciendo".

El técnico del Tenerife recordó que, pese a tener la desventaja de dos puntos con el sexto clasificado, las opciones matemáticas no se han agotado. "Somos conscientes de la tremenda dificultad que vamos a afrontar y que para poder jugar el playoff tendremos que ganarlo todo o casi todo, y aún así igual tendríamos que esperar".

En cuanto a las claves del partido con el Zaragoza, confesó que el arranque protagonizado por el Tenerife coincidió con "los peores minutos" de la escuadra blanquiazul "en un inicio de partido" desde que ocupa el cargo. Ese tramo tuvo la consecuencia del único gol visitante. "Pero el equipo se repuso y, tras el 1-1, volvimos a trabajar bien", comentó antes de referirse a una segunda parte que fue "muy completa en cuanto a ritmo de juego, tener situaciones y jugar en el campo contrario". Esa progresión creció hasta le expulsión de Sipcic. "Ahí tuvimos que guardar el punto, que no es lo que queríamos".

Baraja explicó el motivo por el que no realizó los cinco cambios y optó por apurar para hacer las únicas tres sustituciones. "El equipo estuvo bien en la segunda parte y no quería modificar mucho, salvo por la situación de Dani, que estaba renqueante por unas molestias", contó. "Si Joselu hubiera hecho el gol en la acción del posible 2-1, seguramente estaríamos hablando de otra cosa, pero como siempre nos vamos al resultado, no valoramos el global del partido. Si hubiésemos perdido, me habrían preguntado por qué no hice esto o lo otro. Hay que estar tranquilos. El nivel está siendo bastante alto y hay que valorarlo".