Las Palmas y Girona igualaron sin goles en un choque parejo y trabado, de mucha entrega pero sin acierto y ocasiones de gol, un empate justo que eleva a 12 los partidos consecutivos sin ganar del conjunto amarillo, mientras que al cuadro catalán le resulta insuficiente para acercarse a los puestos de ascenso directo. Entró mejor al partido el cuadro catalán, con personalidad, anticipación e iniciativa a la hora de manejar la pelota, pero en esta fase inicial solo dispuso de una falta ejecutada por Gerard Gumbau que atrapó Josep Martínez. El paso de los minutos fue igualando la posesión del balón, en un choque jugado con ritmo, aunque con poca presencia en las áreas.