El Tenerife apura los días para su primer partido, que será el viernes. La plantilla entrenó ayer y lo hará de nuevo hoy, esta vez en el Heliodoro. Mañana viajará a Madrid, tras otra sesión de trabajo.

Ayer tomó la palabra el lateral aragonés Daniel Lasure, ansioso porque llega "el momento de la verdad". El jugador cedido por el Zaragoza valoró el trabajo desarrollado en estos meses, tendente a perfilar "todos los detalles, que van a resultar vitales". En su caso, aunque ha participado poco, mantiene la ilusión. "Ha sido una situación especial, no he podido tener continuidad hasta ahora y tengo ganas de aportar lo que pueda al equipo", dijo el defensa, que ya ha intercalado esa posición con la de centrocampista.

Lasure no quiere excusarse en la cantidad de viajes tan seguidos que debe hacer el equipo en este tramo de la competición. "Puede ser handicap a priori pero no debe servir de excusa, cada equipo tiene su problemática interna, nosotros tenemos esta peculiaridad, está asumida y hay que afrontarla con naturalidad, sin pensar en excusas", dijo. La vuelta del fútbol genera una sensación de ilusión. "El jugador siempre tiene el gusanillo de competir, ahora si cabe estamos extramotivados porque la situación ha sido un poco extraña". Para el maño, "empezar bien es importante, ganar e ir creciendo. Nos enfrentamos a unas circunstancias nuevas, no sabemos qué cartas va a haber encima de la mesa, no podemos confiarnos pensando en dinámicas anteriores, porque ahora serán totalmente diferentes. Hay que afrontar la situación sin confianzas, jugando cada partido como si fuera una final", por eso aconseja "tener la capacidad de resetar rápido", después de cada partido.