Francis Díaz agradeció ayer, en una rueda de prensa, la oportunidad que le brinda la UD Granadilla, club con el que ha renovado su contrato, de asomarse al fútbol profesional. "Me considero un privilegiado, es un orgullo que hayan pensado en mí, que me hayan abierto una ventana al fútbol profesional", dijo, antes de lamentar que "tradicionalmente en la Isla no se apuesta por entrenadores de Tenerife. Son los mismos libros de la Escuela Nacional de Entrenadores, aquí que en la Península. Soy de aquí y eso, como hándicap, conlleva una responsabilidad extra. Hay mucha gente preparada aquí para estos retos", indicó.

El técnico está muy ilusionado con el nuevo desafío y confirmó que "la reunión para renovar duró muy poco tiempo. Había interés por ambas partes". Francis se mostró firme en su idea de que el Granadilla dará la talla. "Estamos muy ilusionados, no dejaremos de mostrar nuestra idea y nuestra ambición. Vamos a competir a muy buen nivel. Este club se ha ganado un respeto", aseguró. Díaz dijo que el objetivo que le han pedido es "mantener la estabilidad. Soy ambicioso, pero sin tirar campanas al vuelo porque en Primera Iberdrola toca tener los pies en el suelo. Pero debemos competir en cada partido, sin dejar de mostrar nuestra ambición. Nada más entrar, les dije a las chicas que les tocaba recuperar esa ambición que había instaurada cuando competían. Me he reunido con entrenadores de la categoría y sabemos que nos respetan mucho. Lo principal es no pasar los apuros de este curso. A partir de ahí, La Palmera me costa que se les hace cuesta arriba a los rivales, así que aprovecharemos ese impulso", señaló.

Francis valora la acogida que tuvo en el vestuario. "Es una pregunta difícil porque eso tendrían que responderlo las jugadoras. Pero estamos agradecidos con ellas. El nivel de encaje fue importante, la verdad es que tuvimos mucha aceptación. Sabíamos que tenían mucho fútbol dentro, así que tiramos mucho de fibra y corazón. El fútbol de Granadilla nos ha dado mucho, así que rescatamos varios valores que habían tenido en otras fases anteriores. Somos un club importante que se basa en el arraigo de puro corazón y cohesión grupal. Lo demás, vino rodado. Me siento afortunado porque jugadoras que han hecho tanto como Marijose, Pisco o Silvia Doblado hablen así de ti, te produce satisfacción", valoró. En este sentido, se mostró partidario de "funcionar con cohesión grupal, hemos tenido muy buen ambiente en el vestuario", señaló.

El técnico explicó que no llegó a contactar con sus dos predecesores, David Amaral y Ayoze Díaz, "por una sencilla razón. Me gusta entrar así porque es mi estilo. Entendí que era una situación difícil y también por parte de ellos tampoco hubo contactos. Quise dejarles tranquilos porque no son situaciones positivas para nadie. Todo el mundo intentaba darnos mucha información, pero nos reafirmamos en que queríamos verlo in-situ porque cada uno tiene su opinión o visión sobre las personas, pues somos diferentes. Quisimos ir vírgenes para adaptarnos nosotros a la situación", explicó.

El preparador ya enfoca el nuevo curso. "Desde el club se me ha trasmitido que no hay fecha concreta para la vuelta a la actividad, hay aproximaciones pero nada certero, pero tenemos plan A, plan B y plan C", confirmó.