El Balonmano Salud Tenerife, militante en la máxima categoría del balonmano nacional femenino -Liga Guerreras Ibedrola-, siempre ha sido proclive a la suspensión de las competiciones, dada la situación de absoluta incertidumbre que ha generado la crisis del Covid-19.

En esa línea se ha expresado su entrenador, Octavio Pérez, en declaraciones a los medios de la entidad. "El sol volverá a salir cada día y se volverá a entrenar y a jugar. El cuándo es la incógnita, pero así será. Sinceramente, no sé qué pasará con la competición, eso no lo controlamos, pero cada día que pasa y peor es la pandemia, y sus resultados visibles, creo que es más difícil terminar una competición aparentando una normalidad que tardará meses en volver. El balonmano es un deporte de contacto y los riesgos son evidentes. Creo que la Federación -Española- debe tomar decisiones creativas y lógicas en este momento", asegura.

Más renovaciones a la vista

Trabajando bajo la premisa de que el Salud "competirá en División de Honor" el próximo curso, el equipo que dirige Pérez sobre la cancha ya sabe que contará con las hermanas Alma y Agustina Jaén -renovadas hasta 2022-. "Hay cosas muy avanzadas en la plantilla", declara. El preparador tinerfeño lanza un dardo a otras de sus huestes. "La verdad es que me ha dado tristeza ver el silencio a nuestra oferta".