Con momentos de tensión y algunas palabras malsonantes que incluso tuvieron que ser reprendidas por un asambleario. La Federación Interinsular de Automovilismo de Santa Cruz de Tenerife (FIASCT), que dirige Francisco Negrín desde 2019, celebró en la sala de prensa del Pabellón Santiago Martín su Asamblea General Ordinaria 2020. Con un orden del día formado por 11 puntos, tuvo una duración de unas cinco horas. Y eso que solo se habían presentado cuatro propuestas: dos fueron retiradas.

Con 44 asamblearios presentes (hubo algunas ausencias significativas), de los que 20 representaron al estamento de deportistas, 18 al de clubes y escuderías y seis al de oficiales, inicialmente y a efectos de contabilizar el número de votos la cifra fue de 46, ya que algunas escuderías como la Daute-Realejos y Villa de Adeje tienen doblete en este aspecto. Otros asamblearios, además, contaban con votos delegados, aunque la marcha a mitad de la Asamblea de los representantes del estamento de oficiales (había un curso en Los Realejos) hizo que el número votos a contabilizar cambiase, circunstancia que no influyó pues todo lo que se votó fue por mayoría.

Antes de la aprobación del acta de la Asamblea General Extraordinaria celebrada el 18 de diciembre de 2019, la Junta de Gobierno de la FIASCT solicitó a la Asamblea que se le facultara para, en caso de que se aprobase una propuesta que posteriormente no estuviera clara, poder "mejorarla sin tener que convocar una Asamblea Extraordinaria", tal y como sucedió recientemente en la Asamblea de la Federación Canaria (FCA), con los coeficientes y pruebas puntuables para el Campeonato de Canarias de Rallyes de Asfalto 2020.

El presidente hizo un balance de 2019, en el que destacó que se "habían saneado las cuentas" (sobre las tan traídas y llevadas de 2018, en las que no era presidente, no se dijo nada), "invertido en material técnico, de transmisiones y cronometraje); en mejorar el equipamiento del PMA (la guagua de la FIASCT) y en reducir los gastos de combustible", añadió.

Con un estamento de deportistas activo, la figura de un observador que puntuará las diferentes pruebas generó polémica y las lógicas inquietudes para finalmente decidirse que el objetivo será que desde esta temporada hasta 2022 habrá una clasificación de carreras, siendo las mejores puntuadas las que a partir del citado año entren dentro de los campeonatos de Canarias o Provincial (en caso de que hubiese) y las peores solo para los certámenes interinsulares. Lo más curioso es que este año el ranking de pruebas se conocerá a final de temporada y no tras la finalización de cada una y que en las carreras de karting, "¿quién controlará a la FIASCT que es quién las organiza?", preguntó un asambleario.

Igualmente, se informó de la instauración esta temporada de un juez único para los asuntos de disciplina deportiva, tal y como sucede también en la FCA, y que en el caso de la FIASCT será jueza ya que el cargo lo ocupará Jessica Molina, actual secretaria de la FIASCT.

Los asamblearios afrontaron el apartado de prescripciones comunes, en el que se aprobó que en las entregas de premios donde hubieran participado solo dos equipos se le entregase trofeo insular o tinerfeño solo al primer clasificado. También se dio el visto bueno a la creación de un trofeo para los equipos con vehículos de los grupos WRC, E1, E2 y A2, que como la FCA aprobó en su día podrán clasificar, pero no puntuar a efectos de los campeonatos de rallyes de asfalto, manteniéndose la prohibición de participar a los R5+.

En cuanto a los diferentes campeonatos provinciales (pendientes de llegar a un acuerdo con la Federación de La Palma) e insulares de Tenerife 2020, la escudería Arico organizará un rallyesprint en lugar de la Subida; se mantiene, en el caso de los rallyes, coeficientes plus para el Isla Tenerife y el Adeje, y en el caso de la montaña para las pruebas en La Gomera y El Hierro, mientras que la rampa de Los Loros será la que represente a la Isla Picuda en el Regional. No hubo votación, ya que la Junta de Gobierno dijo que era decisión suya, lo que motivó el lógico malestar, más tensión e incluso "faltas a la palabra dada en su día" (se llegó a decir) de los representantes tanto de la Subida a Guía de Isora, actualmente la prueba de mayor rango (puntúa para el Campeonato de España) de esta modalidad de cuantas se disputan en Canarias, como de la Subida a San Miguel. En la montaña solo se permitirá a los equipos un máximo de participación de dos veces al año en el apartado de fórmula rallye, contando ya al efecto incluso la celebrada rampa de Palo Blanco.

En los eslálones de tierra se aplicará la normativa aprobada por la FCA en cuanto a agrupaciones y clases, y no la de los rallyes de tierra, especialidad que la FIASCT.

En el apartado del karting hubo momentos mucha de tensión entre el presidente de la FIASCT y el asambleario Dimitri Rizopoulus. Afirmó que "hay un reglamento y no se está cumpliendo, algo muy grave cuando es la propia FIASCT quien organiza las carreras ", dijo.

El apartado de regularidad sport se aprobó dejarlo en solo dos campeonatos, uno de rallyes y otro mixto, eliminando el de montaña con la salvedad del Trofeo 50.

Se dio el visto bueno a un Campeonato Júnior para menores de 30 años, así como a los certámenes de Drift y 4x4, a las Copas 1.6 y R5 Turbo. Así, de cinco trofeos de estas características que había en 2019, se pasa en 2020 a solo dos.

En cuanto al calendario deportivo, hay cambios de fechas: el 16 de mayo será la Subida a Alajeró en La Gomera y el I Slalom de San Miguel 2020; el 25 de julio, el Rallye Ciudad de La Laguna y la Subida Hermigua (pendiente de que la FCA se pronuncie sobre la fecha de la rampa gomera, ya que en la Asamblea no había ningún representante).

La Subida a Guía de Isora, por exigencias de la Federación Española, se celebrará el 30 de mayo, mientras que el Rallyesprint Atogo se disputará el 12 de septiembre, si finalmente lo aprueba la FCA. La Subida a San Miguel, el 19 de septiembre; y la cuarta prueba de karting, el 14 de noviembre, mismo día que se quiere celebrar el denominado Eco Rallye Isla de Tenerife para vehículos eléctricos e híbridos.