El Sanaya Libby's La Laguna quedó eliminado por 2-3 (25-22, 21-25, 25-19, 23-25 y 13-15) a las primeras de cambio de la Copa de la Reina a manos del OSACC Haro Rioja Voley, rival de cuartos de final. El Pabellón menorquín de Ciutadella, que ya había disfrutado en el primer duelo de un 'tie-break' que se llevó el Alcobendas frente al Olímpico, vivió otro desempate que se decantó para el que más confió en su estilo. Las jarreras, alimentadas por los errores defensivos de las tinerfeñas, maniataron las acometidas por las alas y rayaron la perfección defensiva. Ni los 24 puntos de Brooke Kranda resultaron suficientes para seguir con vida en el 'Torneo del K.O.'.

En el primer set, desde que María Schlegel tomó el servicio, el Sanaya Libby's La Laguna no tardó en ponerse por delante. Las blanquiazules siempre atacaron con criterio y se aprovecharon de los problemas en la reconstrucción que adolecían las riojanas. Alicia Perrin se sumó por dos para llevar el tanteador hasta el 7-5. No obstante, el Haro no flaqueó en la recepción y, poco a poco, encontraron espacios en el fondo de la pista para ponerse por delante (9-10). Con el 'viento a favor', Alberto Avellaneda optó por darle entrada a una Paola Martínez que aportó en defensa.

El set no sería plácido para el Haris, y es que les tocó ir a remolque prácticamente hasta los últimos puntos donde, con un 20-22, Juan Diego pidió su primer tiempo muerto para hacer que la bola pasara por sus principales torres; la diferencia de altura, un argumento que había que optimizar. Vicky Savard atacó por zona cuatro para 'pegarle' al cinco. Con Kranda al servicio, todo se simplificaba y el doble bloqueo por zona dos ya no llegaba a una Alicia Perrin determinante con dos puntos (25-22).

Pese a desperdiciar una renta valiosa en el primer tiempo, el Haro Rioja no se desdibujó en la entrada del segundo set. El conjunto jarrero consiguió entrar bien desde seis y desestabilizó en todos los parámetros del juego al Haris. Las de Juan Diego se dieron de bruces y adolecieron una construcción deficitaria. Araco inclinó la pista hacia una Perrin bien tapada con cuatro brazos. Además, sendos fallos en el servicio propiciaron un 15-20 -máxima renta del partido-.

Tocaba recomponerse y, pese a hacer un parcial de 4-0, varios errores infantiles acabaron con las esperanzas de poner el 2-0. Las de Alberto Avellaneda supieron mantener el ritmo en el ataque y dominar el primer tiempo; el resto lo hicieron las blanquiazules con sendos bloqueos separados y los interminables fallos desde el servicio. Con el 21-24 y servicio a favor, Vicky Savard envió su saque fuera del rectángulo, entregándoles así el set a las jarreras.

Convicción, confianza y que aparecieran actoras secundarias sobre las cuales dinamizar el juego; cuantas más leonas entraran en escena, más opciones tendrían las 'cirujanas' Kranda y Perrin. La opuesta y central lideraron la puntuación hasta un 8-2 que no había conseguido cortar ni un tiempo muerto riojano.

El Haro había disminuido su velocidad en el juego; no obstante, mantenía un nivel defensivo que impidió que la hemorragia fuera insalvable. Desde ese aspecto creció el OSACC hasta reencontrarse con su estilo; clave resultó la dirección de Tatiana Vera, proclive al primer tiempo sobre una Marta Hurst con hambre de triunfo ante el equipo en el que no cuajó en la campaña 2018/19 (14-14).

Y reapareció Mame Diouf. La central senegalesa, después de un set y medio muy discreto -fue una de las mejores en el primero-, bloqueó la rotación de las azules a base de buenos servicios secundados por el férreo bloqueo (sirvió desde el 17-16 al 21-16). En lo consiguiente, el nerviosismo agarrotó los brazos jarreros y el Haris se aprovechó (25-19).

Entre la regularidad en el juego de Haro, y la incapacidad del Haris en tareas defensivas, el set avanzó con máxima igualdad -se dieron 12 empates-. Entre lo más destacado, la irrupción en los primeros puntos de Schlegel; la capitana ganó en confianza e hizo crecer al equipo por zona cuatro y en recepción. Para desgracia blanquiazul, poco duró; las de El Ferial ya le habían cogido la matrícula a su excompañera.

El Sanaya Libby's La Laguna no conseguía meter bien las manos en defensa y, hasta en tres ocasiones, se vieron superadas en ataques carentes de peligro. Pese a los buenos ataques de Brooke Kranda y el buen bloqueo formado por la estadounidense y las canadienses Savard y Perrin, cuando las diagonales imperaban, reinaba la desorganización a la hora de ocupar las zonas. Al final del cuarto set, lo esperado: el 23-25 que llevó al tie-break.

En el tiempo extra, pese a una mejora en la actitud, las riojanas ya estaban crecidas. Después de un esperanzador 4-3, el Haro volvió a tirar de descaro para ponerse por delante y ocupar a Juan Diego García, que optó por hacer los primeros cambios del partido. Jessica Soares y Janine Sandell -avivó la llama con una finta y una diagonal- no pudieron frenar a las de Alberto Avellaneda (13-15). Toca crecer desde el error y seguir las semifinales de este sábado Logroño-Alcobendas (18:30) y Menorca-Haro (16:00)- desde un plano no participante.