A más representantes, mayor probabilidad de infortunios físicos. Hasta siete jugadores del Iberostar Tenerife (el equipo de la ACB con mayor número de internacionales) compiten estos días con sus selecciones en la primera Ventana FIBA clasificatoria para el Europeo de 2021. Y ayer llegó la peor de las noticias posibles para el cuadro canarista, la lesión de gravedad de Santi Yusta, que en su duelo con España frente a Polonia sufrió la rotura en el ligamento cruzado anterior de su rodilla izquierda, lo que, a expensas de una nueva exploración a la que será sometido hoy lunes, deja al internacional fuera de combate hasta la próxima temporada.

Así lo dictaminaron las pruebas médicas a las que fue sometido el jugador canarista, primero en el Pabellón Príncipe Felipe, y seguidamente en el centro hospitalario Quirón Salud Zaragoza El Parque, bajo la supervisión del cuerpo médico de la Federación Española. Todo en contacto directo con los servicios médicos del club aurinegro. Ahora queda por determinar la fecha y el lugar en el que será intervenido Yusta, que se une a la lista de jugadores canaristas dañados en su rodilla en los últimos cursos.

La baja de Yusta es un enorme contratiempo en los esquemas de Txus Vidorreta, que había encontrado en el madrileño el complemento perfecto para darle un salto de calidad a su equipo, bien saliendo como alero titular ante los problemas físicos de Dani Díez, o bien como revulsivo saliendo desde el banco. Así, en los dos meses de competición más recientes, Santi había superado en tres ocasiones los 20 créditos de valoración, una cifra que también sobrepasó en su último encuentro de liga regular en la BCL. Pero es que además, los laguneros se verán obligados a fichar, especialmente para cumplir con el número mínimo de cupos (cinco) que se exige en la Basketball Champions League, sin necesidad de tirar del vinculado Alberto Cabrera en el tramo más exigente de la temporada. Ahora mismo, los aurinegros solo cuentan con otros cuatro jugadores de formación: Álex López, Dani Díez, Fran Guerra y Álex Suárez. Además, una posible contratación o cesión de otro conjunto de ACB debe realizarse, como muy tarde, el 28 de febrero.

Se trata de la tercera Ventana FIBA consecutiva de la que el cuadro lagunero sale mal parado en forma de lesiones, contratiempo con el que luego tienen que lidiar los aurinegros. Así, en el primer parón por selecciones del ejercicio 18/19, y dentro de los partidos clasificatorios para la Copa del Mundo del pasado verano, el dañado fue Pierre Antoine Gillet, que en el choque que le midió con Bélgica el 27 de noviembre a Islandia, acabó tocado del sóleo. Eso llevó al ala pívot a estar algo más de un mes de baja, tiempo en el que se perdió tres encuentros ligueros del Iberostar, más un cuarto en el que evidenció una manifiesta falta de rodaje. Su ausencia llevó a la entidad isleña a sondear al mercado, y lo intentó con Vlado Jankovic y con Siim Sander Vene, si bien ninguna de las dos negociaciones llegó a buen puerto.

Tres meses después, en la última serie de encuentros de combinados nacionales, el damnificado fue Rodrigo San Miguel, que tras apenas 1:46" de juego contra Turquía, recibía un golpe en el hombro, concretamente una contusión en la articulación externoclavicular y primera costilla derecha. El aragonés estuvo de baja dos semanas y le costó unas cuantas más volver a recuperar su mejor tono. Una minucia en comparación con lo que ahora ha sufrido Santi Yusta.