El periódico Il Resto del Carlino publicó ayer que la Virtus de Bolonia, vigente campeona de la Basketball Champions League, ha sido castigada con la máxima sanción posible al decidir abandonar la competición auspiciada por la FIBA tras haber formalizado, oficialmente, su inscripción en la edición de la temporada en curso. Independientemente de que luego decidiera participar en la Eurocup. Así, el castigo para los italianos asciende a los 250.000 euros (una cuarta parte de lo que recibió por llevarse el título), si bien la entidad se encuentra en negociaciones con la BCL para rebajar dicha cifra.