Una Copa del Príncipe (2012), una Champions (2017) y una Copa Intercontinental (2017) lucen en lugar destacado en la sala de trofeos que el CB Canarias posee en la cuarta planta del Santiago Martín. Hoy, los aurinegros tienen la opción de lograr el cuarto entorchado tras un partido a vida o muerte. Una posibilidad casi inalcanzable para la mayoría de equipos de nivel medio, pero que el cuadro lagunero va camino de convertir en costumbre en esta última década. Aunque prácticamente en nada se parece este equipo al que lograra varios de estos galardones, en su plantilla sí hay varios jugadores expertos en estas lides.

Quien se lleva la palma en este sentido es Marcelinho Huertas, un experto en salir airoso de finales, tanto en competiciones de clubes como de selecciones. Con la canarinha ha ganado Torneo de las Américas (2005 y 2009), Sudamericano (2006) y Panamericano (2007), una diversidad que también repite en dos de los clubes por los que ha pasado. Con el Joventut levantó la FIBA Eurocup (2006), mientras que defendiendo la camiseta del FC Barcelona se llevó una Supercopa (2011), una Copa del Rey (2013) y además una Liga (11/12) al ganar al Real Madrid en el quinto encuentro de la final.

Hace tres temporadas Dani Díez también fue protagonista (con dos triples) en el parcial de 2-20 con el que el Unicaja venció al Valencia en el tercer y último duelo de la final de la Eurocup 16/17. Tres semanas después Bogris fue de los más destacados en la victoria del Iberostar en la final de la Champions, aportando 10 puntos y cuatro rebotes en el trunfo contra el Reyer Venezia. También en esa temporada, aunque a inicios, Sasu salin anotó 10 puntos en la consecusión de la Supercopa por parte del Gran Canaria, que apalizó en la final al Barcelona (79-59).

Algo antes, concretamente en la campaña 12/13, Gio Shermadini aportó su granito de arena (tres puntos, un rebote y dos asistencias) para que el Olympiakos se llevara la Euroliga frente al Real Madrid. El otro antecedente en la plantilla canarista lo representa Iffe Lundberg, que hace dos temporadas (17/18) logró el ascenso a la ACB al vencer en el quinto y definitivo partido al Melilla (97-67). Eso, sin tener en cuenta al propio Txus Vidorreta, que ya ganó aquella Champions y que además logró levantar la Supercopa de la siguiente campaña, la que dirigió con el Valencia. Todos ellos están deseando repetir la experiencia.