Manuel Mosquera (A Coruña, 10 de agosto de 1968), es un superviviente. Desde el 27 de febrero de 2019, dirige los destinos del Extremadura UD, equipo al que rescató de un descenso casi seguro, en un tramo final de temporada muy fructífero, que hizo posible que el equipo de Almendralejo garantizase su continuidad en el fútbol profesional, incluso con dos jornadas de antelación al final de la Liga. Manuel amplió su contrato con los azulgrana y, al cabo de casi un año, ahí sigue. Rara avis en el fútbol profesional, mucho más si se tiene en cuenta que el Extremadura vuelve a estar en descenso.

La condición excepcional del caso de Manuel se advierte echando una mirada a la segunda mitad de la tabla clasificatoria: ninguno de los once últimos ha mantenido a su técnico, algunos incluso han cambiado dos veces, como el propio Tenerife. Desde el undécimo puesto hacia abajo, la criba ha sido casi absoluta. El Sporting sustituyó a José Enrique por Djukic; el Deportivo, a Anquela por Sampedro y a éste por Fernando Vázquez; el Tenerife, a López Garai por Sesé Rivero y a él por Baraja; el Málaga a Víctor Sánchez del Amo por Sergio Pellicer; el Real Oviedo a Sergio Egea por Javi Rozada; el Albacete a Ramis por Lucas Alcaraz; el Lugo a Eloy Jiménez por Curro Torres y el Racing de Santander a Iván Ania por Cristóbal Parralo y a éste por José Luis Oltra.

Manuel resiste, ayudado por la ascendencia que tiene sobre el aficionado extremeño. El gallego estuvo 13 temporadas en el histórico CF Extremadura en sus tres etapas en Almendralejo, equipo con el que disputó 483 partidos y marcó 109 goles, una cifra que lo situó como el máximo goleador de la historia del desaparecido club y del fútbol en Almendralejo. Fue y sigue siendo ídolo y ahora lucha contra el desgaste que produce cada derrota siendo responsable técnico.

Inspirado en el estilo y en las enseñanzas que recibió de Rafa Benítez, de quien se declara un ferviente admirador, Manuel elogia en una entrevista que publica El Día este jueves, las virtudes del 'nuevo' Tenerife de Baraja, al que su Extremadura se enfrenta el sábado en una final anticipada. "Ya me gustaba el Tenerife con López Garai, pero ahora con Baraja también juega bien y es más agresivo", y no repara en elogios individuales, en especial para el capitán Suso, que "tiene el ADN del Tenerife".