Real Madrid y Atlético protagonizan un derbi de rachas opuestas, con los de Zidane lanzados en su mejor momento, con una racha de 20 partidos sin perder y fiables como equipo, ante la necesidad del equipo de Simeone, en el momento más irregular de su larga etapa.

Seis visitas ligueras seguidas del Atlético al Bernabéu sin derrota plasman un problema que debe resolver Zidane. Su última fórmula, dar un giro con cinco centrocampistas, no le funcionó en la Supercopa. Simeone lo supo contrarrestar. Podría repetirla, pero el momento invita a dar un paso más ofensivo y apostar por una línea de cuatro en la medular, lo que provoca la duda entre Isco y Modric. Ambos descansaron en Copa, pero a día de hoy Casemiro, Toni Kroos y Fede Valverde son intocables. El descarte de jugadores como Rodrygo y Bale, fuera de la lista por decisión técnica, Nacho, Hazard y Brahim, resta fuerza a la opción de jugar con tridente.

Enfrente, el Atlético ha agotado su margen de error. Está a diez puntos del Real Madrid y en cuadro por las lesiones. No estarán ni Joao Félix ni Costa ni Giménez ni Arias. Tampoco probablemente Koke ni Trippier, por una lesión miotendinosa y una pubalgia.

Sí está disponible Yannick Carrasco, cedido hasta junio y dos años después a las órdenes de Simeone, en un movimiento inesperado en el mercado de enero.