La ronda previa a los octavos de final de la Copa del Rey aguarda al Tenerife. Se trata de una meta cruzada con poca frecuencia por un equipo que llegó tan lejos en diecisiete de sus 64 participaciones en esta competición. Tras superar a Mensajero y Rayo Majadahonda en las eliminatorias previas a partido único incluidas en el nuevo formato copero, los blanquiazules disputarán mañana los dieciseisavos de final ante el Real Valladolid, de nuevo con ida pero sin vuelta.

Su estreno en esta fase se produjo en la campaña de su primer ascenso a la máxima categoría (1960/1961). Con Heriberto Herrera al frente, el Tenerife derrotó en la ronda previa al Salamanca para seguir avanzando a costa del Elche y del Zaragoza, hasta quedarse a las puesta de la semifinal al perder con el Atlético de Madrid. Luego, su condición de club de Primera le permitió acceder directamente a los dieciseisavos de final en la Liga 1961/1962. La escuadra entrenada por Enric Rabassa venció con claridad al Atlético Baleares (3-0 en casa y 1-0 fuera) para llegar a octavos (derrotó al Oviedo) y caer en cuartos con el Sevilla.

El Baleares fue, precisamente, su rival en el cruce anterior a los dieciseisavos de la temporada 1962/63. Un hat-trick de Santos en el Heliodoro encarriló el pase tinerfeño. Su siguiente víctima fue el Osasuna, pero el obstáculo del Valencia en cuartos de final ya resultó demasiado alto para los de Eduardo Toba.

Estando en Tercera, el Tenerife se reencontró con los dieciseisavos de final en el curso 1970/71. El camino fue largo: Triana, Burgos y dos clasificaciones aseguradas por quedar exento llevaron al representativo a una etapa en la que una UD Las Palmas de Primera no dejó ningún lugar a la sorpresa.

La posterior experiencia, en 1976, tiene un capítulo especial reservado en la historia del club, ya que el premio por vencer al Sporting en la tercera ronda fue un enfrentamiento copero en octavos con el Real Madrid en el que el Tenerife rompió los pronósticos. Los tantos de García Murcia e Illán en el Rodríguez López, el 9 de marzo de 1976 (2-0), dejaron fuera al favorito pese al tempranero gol de Santillana en el Bernabéu (1-0).

El trayecto recorrido en el ejercicio 77/78 antes de salir de la Copa en octavos resultó variado. Sestao, Malgrat y Eldense no pudieron con un Tenerife que en la cuarta ronda (dieciseisavos) logró un apurado triunfo ante el Mestalla. El siguiente desafío no tuvo la misma respuesta. Un 3-0 en la visita al Valencia ya fue insalvable.

La cota de los octavos de final animó la participación del Tenerife en la Copa durante la década de los 80. Castellón, Sabadell y Sporting se encargaron de frenar a los insulares en 1985, 1986 y 1990.

Ya dentro de su ciclo más largo en Primera, el de la década de los 90, el EuroTenerife entró directamente a los octavos de final dos veces: en 1994, con Jorge Valdano en el banquillo, fue semifinalista; y en 1997, con Heynckes, solo jugó una eliminatoria, ante el Real Betis, con triunfo verdiblanco.

En esa histórica etapa sobrepasó en un par de ocasiones los dieciseisavos de final, frente al Rayo Vallecano en 1990 (Miera) y ante el Levante en 1996 (Heynckes).

A partir del descenso a Segunda de 1999, el protagonismo copero del Tenerife fue esporádico. El techo lo dejó en 2001 cuando los de Rafael Benítez perdieron en octavos frente al Mallorca de Luis Aragonés. De hecho, en las veinte temporadas posteriores se clasificó en cinco ocasiones para la ronda a la que le medirá mañana con el Real Valladolid. El pase de la Liga 09/10 fue gratuito por ser un club de Primera. En la campaña 2004/05 tuvo la suerte de recibir al Real Madrid y en la 2017/18 cedió a ida y vuelta con el Espanyol.