Antonio González, veterano entrenador tinerfeño y hasta ahora responsable técnico del segundo equipo del club, se hace cargo de la dirección de la primera plantilla de la UD Granadilla Egatesa, en sustitución de Ayoze Díaz, que rompió su vínculo con la entidad precisamente el mismo día que estaba fijado el acto de la firma de su nuevo contrato.

Una discrepancia entre Ayoze y el presidente, que le propuso a su entrenador postergar la citada firma hasta el próximo martes, desembocó en la ruptura. Ambos se habían citado en la sede de la Federación Territorial, pero el dirigente no acudió. Ayoze no consideró conveniente el aplazamiento y el presidente, Sergio Batista, aceptó su renuncia, que se convirtió en oficial ayer cuando la entidad emitió un comunicado en el que señala que fueron "motivos personales" los que provocaron la renuncia del entrenador.

Ayoze era segundo preparador del club desde que regresó, tras su primera etapa, el 20 de octubre pasado. El 23 de diciembre fue destituido David Amaral, en la última jornada de Liga de 2019, y Ayoze accedió a la dirección del plantel de forma provisional, a la espera de que se hiciera oficial su cambio rol en el organigrama y se le reconociera a todos los efectos su condición de primer entrenador, circunstancia pactada para la tarde del pasado miércoles.

En total, Díaz solo ha dirigido al equipo dos veces, una con derrota 1-3 ante el Sporting Huelva, y la otra el pasado sábado, cuando logró una victoria agónica, pero de gran valor, sobre el Sevilla (1-0).

"No es por motivos personales"

Ayoze valoró ayer la situación y explicó su versión de lo sucedido, para enfatizar que no sale del Granadilla "por motivos personales, como ha comunicado el club". El exfutbolista expresó su situación. "Estoy tranquilo porque lo he dado todo; me voy con la consciencia tranquila. Mejor no estar si no quieren que estés", dijo en una entrevista concedida a Radio Club Tenerife, en la que añadió que "habría que preguntarse si otros también". El técnico estaba convencido de que las jugadoras apostaban por su continuidad. "Eso es lo que más duele", pero la situación le resultó insostenible. "No tenía ficha de primer entrenador y me fueron dando largas hasta que me llamé al presidente. Cuando le dije que quería arreglar mi situación profesional y que si no, me iría, su respuesta fue: pues vale. Me voy con la cabeza alta porque lo he dado todo. Pero cuando ves que no confían en uno, prefiero echarme a un lado. Ya habrá otras oportunidades", dijo también.

El ya extécnico blanquiazul se refirió a las gestiones que ha hecho el club hasta decidir quien sería el entrenador. "Cuando la duda está en el aire, las cosas no salen bien. Y la duda sobre mí estaba desde el principio. No voy a ser yo quien cuente ciertas cosas. He puesto todo de mi parte para que el Granadilla saliera adelante, ¿en otros lados también ha sido así? Me voy súper feliz y orgulloso de haber dirigido a este equipo y me quedo con las cosas positivas. He aprendido muchísimo", terminó diciendo.